Uno de los mayores inconvenientes a la hora de montar una empresa es resolver todos los trámites burocráticos que ello implica –según el índice de facilidad para hacer negocios, elaborado por el Banco Mundial, España ocupa la trigésima posición en el ranking de los mejores países del mundo para abrir una empresa–. El Gobierno, en conjunto con la Federación Española de Municipios y Provincias (F.E.M.P), ha puesto en marcha Emprende en 3, una iniciativa a través de la cual se facilita al empresario realizar trámites burocráticos, como poner en marcha el propio negocio o modificar la actividad comercial sin tener que salir de casa. 

Para disfrutar de los beneficios de esta plataforma, el negocio del interesado tiene que situarse en uno de los 1.600 municipios que colaboran en este proyecto. Una vez rellenado el formulario de Emprende en 3, el ayuntamiento correspondiente recibe la información y, en un máximo de tres días hábiles, obtienes el justificante de registro necesario para iniciar, modificar o cesar la actividad comercial. También permite realizar el proceso de cambio de titularidad. Para ello, solo se debe disponer de un ordenador, un DNI electrónico –o certificado digital– y conexión a Internet.

Otros trámites que se pueden realizar a través de esta herramienta incluyen la presentación de la declaración responsable y de una comunicación previa (para el cambio de titularidad de una licencia, de una actividad, o el desistimiento o prórroga de un expediente). Por último, la plataforma permite consultar todos los trámites que se han realizado hasta la fecha y te indica aquellos que están pendientes de presentar. 

El Gobierno prevé la aprobación de la Ley de Startups para este año

Otra manera con la que el Ejecutivo pretende impulsar el emprendimiento es a través de la aprobación de la Ley de Startups. A principios de mes, la ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, prometió “acelerar” las negociaciones parlamentarias en septiembre. Su objetivo es que la ley esté aprobada antes de que termine el año. El Consejo de Ministros dió luz verde a finales del año pasado al proyecto de ley, que considera startups a los negocios innovadores con sede en España que tengan menos de cinco años –7 años en caso de empresas de energía, industriales o de biotecnología– y que empleen a la mayoría de su plantilla dentro del país. Así, se amplía la consideración de “empresa de nueva creación” de tres a cinco –o siete– años.

El texto, que busca dotar de un marco regulatorio concreto a este tipo de empresas, reduce del 25% al 15% los tipos de los impuestos de sociedades y de la renta de no residentes en los cuatro primeros ejercicios a contar desde que el negocio tenga una base imponible positiva –durante los dos primeros, la empresa también puede aplazar la deuda tributaria de estos dos impuestos–. Además, el proyecto de ley elimina la doble imposición de la Seguridad Social durante tres años para los emprendedores que también trabajen por cuenta ajena. 

Desde la perspectiva del inversor, la normativa introduce nuevas ventajas, como la subida de 12.000 a 50.000 euros anuales de la exención impositiva de los stock options de la startup o la ampliación a 100.000 euros anuales de la deducción por inversión en empresas de nueva o reciente creación. Además, en este último caso, el descuento aumenta del 30% al 50%. 

Otro aspecto destacable es la creación de la figura del “nómada digital” para referirse a los emprendedores que trasladen su actividad a España, a los que se les permitirá residir por un periodo de cinco años en el país y disfrutar de un régimen impositivo especial, además de darles la posibilidad de tributar por el impuesto sobre la renta de no residentes.