Tomar conciencia de los propios obstáculos y miedos, pero también de las fortalezas y, sobre todo, de la capacidad creativa de uno mismo. Ese es el objetivo con el que nació ‘Emprender desde la raíz’, una iniciativa que busca empoderar al alumnado para que sea capaz de desarrollar su propio proyecto, pero teniendo presente sus cualidades reales como persona.

De la mano de cuatro emprendedoras procedentes del ámbito de la psicología, la formación, la educación y la empresa, este proyecto cuenta con el respaldo de Pazo de Vilane, grupo familiar dedicado a la producción de huevos camperos de manera artesanal.

“Hay que buscar la esencia de lo que somos. Algo que nos mueva más allá del mero hacer”, comentó una las co-fundadoras de la empresa gallega, Piedad Varela Portas, durante la presentación en formato taller de este proyecto a un grupo de emprendedores donde estuvo presente DIRIGENTES.

El programa está dirigido a cualquier tipo de emprendedor, desde personas que desean iniciar un negocio, están pensando en hacerlo o bien que su proyecto se encuentre en fase de despegue, consolidación o cambio.

Tradicionalmente, el apoyo que reciben los emprendedores está más orientado a procesos técnicos, como puede ser la creación de una empresa o el asesoramiento financiero, fiscal, económico y laboral, dejando al margen los aspectos vinculados con la psicología. Un factor este último que, en opinión del equipo que integra ‘Emprender desde la raíz’, representan un ‘factor clave’ en todo el proceso.

Los cursos se impartirán el próximo mes de octubre durante dos fines de semana en régimen de internado en A casa da Terra. Allí, los asistentes tendrán la oportunidad de sumergirse de lleno en una metodología de aprendizaje grupal basada en un recorrido interno e individual dividida en tres ejes. El primer de ellos, los principios de la terapia Gestalt y el arteterapia donde se trabajarán conceptos que ahondan en el desarrollo del autoconocimiento como la escucha, la presencia, la responsabilidad, la mirada del presente, la experiencia o la idea del proceso.

Una vez desarrollado lo anterior, se pasa a la práctica con trabajos corporales que ayudarán al participante a identificar sus tensiones, su nivel de energía, su respiración y cómo funciona el cuerpo en cada situación. La idea pasa porque éste se convierta en un vehículo de exploración y descubrimiento que permitan al usuario un equilibrio entre la mente, las emociones y el cuerpo y explorar así, las necesidades y potencialidades de cada uno.

Por último, tiene lugar la parte creativa, enfocada al quehacer emprendedor. Este es uno de los puntos más importantes del curso, donde se abre paso al campo creativo a través de dinámicas expresivas y de juego que buscan la creación espontánea, natural y genuina. En cualquier caso, siempre se adaptan a las necesidades y expectativas de cada uno de ellos con la finalidad de alcanzar los objetivos esperados.