Acciona ha obtenido un beneficio neto de 222 millones de euros entre enero y septiembre de 2018. Este resultado supone un 4,2% menos para la compañía que achaca esta cifra al cambio de perímetro tras la venta de activos no estratégicos.

El Ebitda de Acciona se reduce sensiblemente un 2,6% desde los 907 millones que obtuvo entre enero y septiembre de 2017 a los 883 del mismo periodo de 2018. No obstante, el Ebitda, en términos homogéneos, crece con fuerza casi un 10%. Sus divisiones de Infraestructuras crecieron un 8,3% y Energía se alzó un 1,2%, pese a la venta de sus plantas termosolares y Transmedirerránea.

En este sentido, en el último año, la compañía redujo su deuda un 11,4% así como sus gastos financieros en un 9,7%. Al mismo tiempo, continúan teniendo un fuerte ritmo inversor, destinando 926 millones de euros. Una cifra compuesta por 443 millones como inversiones brutas, 101 millones destinados a impulsar la actividad promotora de Acciona Inmobiliaria, 209 millones de pagos adicionales de capex de proyectos y otros 173 millones para recompra de acciones.

En el mes de mayo, la compañía vendió sus cinco plantas termosolares en España y en junio la naviera Transmediterránea. Asimismo, en el último trimestre del año anterior, cerró la venta de la concesión de la Ruta 160 en Chile. Unos hechos que han afectado a los resultados comparando 2017 y 2018.

Las ventas totales en los tres primeros trimestres del año se han situado en los 5.427 millones de euros, un aumento del 1,8%. Este incremento se debe a unos mayores ingresos en Energía, un 24,5% más, un volumen superior de negocio de Infraestructuras (1,4% más) pese al descenso de Otras Actividades.