El comercio electrónico ha venido para quedarse. Lo constatan los informes elaborados por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) que arrojan incrementos en cada publicación. La última, correspondiente al tercer trimestre de 2018, marca un hito histórico: la compra por Internet en España superó la barrera de los 10.000 millones de […]
PYMESDirigentes Digital
| 17 may 2019
El comercio electrónico ha venido para quedarse. Lo constatan los informes elaborados por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) que arrojan incrementos en cada publicación. La última, correspondiente al tercer trimestre de 2018, marca un hito histórico: la compra por Internet en España superó la barrera de los 10.000 millones de euros entre julio y septiembre del año pasado, con un ritmo de crecimiento cercano al 30%. Un escenario en el que no es casualidad que los marketplaces se erijan como los responsables de esta tendencia.
Este tipo de plataformas que permiten a cualquier empresa ofrecer sus productos en su página web, han abierto un mundo de posibilidades para el pequeño comercio, hasta convertirlas en las verdaderas protagonistas de la venta electrónica. Se estima que en España alrededor del 44% de las tiendas online opera en alguno de ellos, según los datos recabados por el hub ‘The Valley’.
En este sentido, uno de los principales marketplaces de referencia a nivel mundial -eBay- ha realizado un análisis en el que recopila las principales características de las pequeñas y medianas empresas que operan a través de él. La conclusión es clara: los empresarios que exponen sus productos en este sitio web lo conciben como un escaparate mundial que les permitirá vender a un precio fijo.
Atendiendo a los datos recogidos por el citado sitio web se desprende que las pymes que han comenzado a funcionar en el último año en eBay venden sus artículos a una media de 23 países con Alemania, EEUU, Italia, Francia o Reino Unido a la cabeza. Un mapa en el que posiblemente figure América Latina en los próximos años con Argentina, México o Puerto Rico abriéndose paso entre los diez principales puestos.
Estas empresas han visto el enorme potencial que supone para las zonas despobladas el comercio electrónico como una manera de reactivar su economía. Es el caso de Castilla-La Mancha. Según el citado estudio, esta comunidad es junto a Cataluña, Madrid, Comunidad Valenciana e Islas Canarias las regiones en las que se ubican los negocios recién estrenados en el canal online.
Como es habitual desde hace tiempo, estas pymes proceden en su mayoría del sector de la electrónica, casa y jardín y moda. Y aunque no se sabe si guarda relación con el tipo de productos que venden, lo cierto es que el verano es la temporada predilecta para debutar en el comercio electrónico.