El Ibex 35 se ha tomado un respiro en el gran rally iniciado con el nuevo año y se queda rozando los 8.700 puntos. Este 9 enero ha regresado la rutina y el frenetismo a los mercados. Por un lado, la reapertura de China invita al optimismo, pero despierta temores por la nueva variante del Coronivarus, llamada Kraken. Por otro lado, la revuelta en Brasil está generando cierto temor entre los inversores que miran el desarrollo del conflicto con precaución.

Esta semana, además, se conocera el nuevo dato de inflación de los Estados Unidos correspondiente al mes de diciembre y los inversores centrarán ya su visión en las próximas reuniones de los bancos centrales, en las que se esperan nuevas subidas de tipos, aunque más moderadas.

Por otro lado, la temporada de resultados está a la vuelta de la esquina y los inversores se preparan ya para conocer las cuentas de las principales empresas cotizadas para tomar el pulso empresarial. Algo que será transcendental para la recuperación o no de las bolsas.

En el Ibex

"Desde un punto de vista técnico, comportamiento destacado del Ibex-35 donde – por fin – su composición es mucho más favorable a los ciclos inflacionarios. No tener tecnología es, en este contexto, el mayor valor del indicador en el corto plazo. Escapada alcista una vez superados los 8250 puntos que han logrado romper también los 8500. De momento, muro de granito a la vista en la zona de los 8700-8750 puntos. Entrados en niveles de sobre-compra, tomamos como escenario más probable si no hay un apoyo global, que los precios pasen a un movimiento de consolidación bajista. Resistencia en los 8700-8750 y zona de soporte ahora en los 8500”, comenta Javier Molina, portavoz de eToro en España.