Durante los último 7 días, los inversores mantuvieron la atención en el incremento de casos de covid-19 en China, que podrían provocar que el gobierno chino endureciera las restricciones a la población, lo que impactaría negativamente en la economía. Los bancos centrales fueron foco de atención, también, con la publicación de las actas de las […]
Durante los último 7 días, los inversores mantuvieron la atención en el incremento de casos de covid-19 en China, que podrían provocar que el gobierno chino endureciera las restricciones a la población, lo que impactaría negativamente en la economía.
Los bancos centrales fueron foco de atención, también, con la publicación de las actas de las últimas reuniones tanto de la Reserva Federal como del BCE y de las que se desprendieron que el endurecimiento en la política monetaria podría comenzar a reducirse para evitar una recesión en la economía.
Por su parte, la bolsa española, encadenó el pasado viernes seis jornadas consecutivas de ganancias, una racha que no se veía desde el pasado mes de agosto y superó la barrera psicológica de los 8.400 puntos, situándose también en niveles de agosto.
La próxima semana vendrá cargada de multitud de indicadores económicos que darán pistas sobre lo que podemos esperar de lo que queda de año.
Durante la próxima semana, los mercados se moverán al ritmo de los siguientes acontecimientos:
La semana arrancará de forma tranquila, sin demasiados datos que puedan afectar al ritmo de los mercados. En Asia, se publicará la balanza comercial de Hong Kong.
La jornada del martes dará a conocer el indicador de las ventas industriales en Italia. Según señala el analista global macro de Fortage Funds, Rafael Ojeda, este dato “se espera que sea negativo, con una caída hasta el 18,2%”. Las ventas industriales en Italia por lo tanto “van a perder fuerza” y en parte “se debe al IPP que va a elevarse del 41,8% al 44,6%”.
“Si los costes productivos se incrementan, las ventas industriales tendrán que caer”, señala el analista.
En España contaremos con el dato de IPC, que será “muy importante” para los inversores, según señala Rafael Ojeda. Partimos de una tasa del 7,30% y “se espera que perdamos el nivel del 7%”.
“Sería un dato bastante esperanzador porque empezaría a normalizarse la situación y a calmarse los ánimos referentes a las subidas salariales que van a empezar a pedir los sindicatos ante la pérdida de poder adquisitivo por parte de los trabajadores a nivel nacional”, añade el analista.
“Que empecemos a doblegar la inflación y caiga a niveles más razonables, es un gran indicador”.
En Europa tendremos el dato del clima empresarial que parte del 0,76 y la confianza del consumidor que parte del -23,9.
El sentimiento económico “que se estima en el 93”, indica que “lo peor ya ha pasado y que la economía poco a poco va a empezar a ver brotes verdes y a repuntar un poco”, señala el analista de Fortage Funds.
En Alemania, contaremos con el dato de IPC, que se sitúa en el 10,40% y se espera que empeore hasta el 10,90% “lo que puede marcar la senda por la que caminará Alemania”.
“El EBCE tendrá que fijarse mucho en cómo realiza las subidas de tipos de interés y que probablemente serán de 50 puntos básicos, en lugar de 75 pb que se preveían hace unas semanas, ya que EEUU ha mejorado sus expectativas y probablemente Europa irá a la par”, apostilla Rafael Ojeda.
Por último, se conocerá el IPI industrial en Japón que se espera mejor que el anterior e indicaría una “mejoría en la producción industrial de otras economías como la japonesa”. Esto tiene que ver con la previsión de que los puertos chinos “consigan poco a poco ir desencallando los cuellos de botella” y controlen la situación con el covid y podamos mejorar la producción industrial en Japón, Europa y el resto de economías.
Aunque “Todo esto puede cambiar bruscamente si China vuelve a practicar cierres perimetrales duros en las principales economías por el incremento de casos de contagios, aunque esto no está sobre la mesa todavía”, concluye Rafael Ojeda.
La jornada empezará con el PMI manufacturero chino, que pasará de 49,2 a 49,3 según la estimación y el PMI no manufacturero de China, que pasaría del 48,7 al 51,7.
Estos datos provisionales apuntarían a que la manufactura y la no manufactura china van a mejorar fundamentalmente por la apertura del comercio internacional por los puertos chinos, “que parece que empieza a controlarse”.
“Tendremos que esperar a ver si las previsiones correctas porque los últimos datos de incrementos de casos de covid podrían impactar en los mismos”, señala el analista.
“La economía parece que va a empezar a repuntar, pero China necesita crecer a tasas más importantes para justificar las medidas que se están tomando desde el Gobierno”, asevera Rafael Ojeda.
Además, se conocerán datos macroeconómicos como el índice de Precios al Consumidor final y el PIB en Francia, que se mantendrá en línea con el dato del mes anterior. Datos de paro en Alemania y el PIB del tercer trimestre de Italia.
Conoceremos el IPC en la eurozona que se prevé que pase del 10,6% al 11,20%, “lo que no es muy halagüeño”.
La jornada del jueves contará con una nueva batería de datos económicos que empezarán con el PMI manufacturero de Japón, “que se espera que mejore”.
Conoceremos las ventas minoristas en Alemania que podrían contraerse, lo que significa que “si Alemania presenta malos datos, podría lastrar al resto de economías europeas”, asevera Ojeda.
También se conocerán los PMIs en España y se espera que mejoren hasta el 46,8”.
Rafael Ojeda afirma que “la economía española va a ser de las que mejor lo haga en este final de año y principios del que viene, frente a otras economías de la eurozona que lo van a pasar mal, fundamentalmente la economía alemana”.
Se prevé que los PMIs italianos mejoren, pero estos mismos datos, que se conocerán también en Alemania, Francia y la eurozona, “probablemente serán peores”.
En EE.UU. conoceremos el gasto del consumo personal, “que empeorará”, lo que se traduce en que “las medidas que está tomando la Reserva Federal funcionan y el gasto se está disminuyendo”, señala Ojeda.
El cierre de la semana llegará con más datos macroeconómicos para Europa, como la balanza comercial en Alemania, la producción industrial en Francia o el índice de precios de producción en la eurozona.
En Estados Unidos, se conocerán datos de empleo, “que se espera que empeoren”, después del incremento de la agresividad en la postura de la Fed durante los últimos meses.