Vontobel Asset Management celebró su reunión anual sobre renta fija, en esta ocasión centrándose en las oportunidades que presenta este mercado, que cobran especial relevancia para los inversores durante este año.

La firma explica que el mercado de renta fija fue duramente castigado durante el año pasado por el fuerte incremento de los tipos de interés por parte de los bancos centrales, que sacaron su artillería pesada para combatir una subida desenfrenada de los precios tras la invasión de Ucrania por parte de Rusia.

En el 2023, aunque se perpetúen algunas incertidumbres, los bancos centrales parece que empiezan a contemplar un inicio en el relajo de la subida de tipos de intereses y el temor a la recesión en Estados Unidos y en Europa comienza a situarse en un segundo plano.

“Las yields de partida son enormemente atractivas frente a la historia más reciente y pueden ejercer de motor de rentabilidad y de colchón ante nuevas turbulencias”, señalan desde la gestora suiza.

Mondher Bettaieb-Loriot, director de crédito de Bontovel AM, resaltó las dificultades que atravesó la economía durante el año 2022, donde destacó la reacción de los bancos centrales y el incremento del precio del gas, que impactó especialmente en Europa.

Asimismo, destacó la oportunidad de inversión en el investment grade a pesar de la volatilidad y quiso lanzar un mensaje tranquilizador ante la posibilidad de que la sombra de Silicon Valley Bank pudiera extenderse a los bancos europeos, descartando esta opción por su robustez.

Felipe Villarroel, socio y gestor de carteras de TwentyFour AM-Vontobel, afirmó que se observa una contracción de la economía en la eurozona, lo que es “bueno” porque es lo que tratan de conseguir los bancos centrales con su política monetaria. Aunque la inflación continúa en niveles más altos de los que les gustaría a las instituciones.

Por su parte y en cuanto a SVB, el gestor considera que hay que esperar para ver si se convierte en una corriente bancaria que se extiende a otros bancos, aunque no lo ve demasiado probable. Sin embargo, por ahora, podría esperarse que la Fed cambie su postura con respecto a la política monetaria.

En cuanto a la renta fija, Villarroel considera que actualmente se trata de un mercado muy atractivo con unos yields “que no habíamos visto en una década”. Especialmente el sector bancario, con los bancos europeos en máximos históricos y con bajos niveles de morosidad, a pesar de la volatilidad y el nerviosismo sufridos durante los últimos días. 

Nuria Jorba, analista sénior de crédito de Vontobel, por su parte, destacó las valoraciones “positivas y muy atractivas” que ofrece la renta fija emergente. Además, presenta una menor exposición al riesgo de duración que la deuda soberana.

“De los últimos 20 años, la renta fija emergente y corporativa solo ha experimentado retornos negativos en 4 años”, explica Jorba. La rentabilidad media de los últimos 20 años se sitúa en el 5,6% y experimenta repuntes superiores después de vivir un año de retornos negativos.

Además, se trata de una renta fija que ofrece una elevada diversificación ya que cuenta con emisores por todo el mundo y no solo a nivel geográfico, sino que ofrece diversificación por industria y por sectores.

Las emergentes ofrecen unos fundamentales “mucho más sólidos” ya que tienen que demostrar que merecen esta calidad crediticia, añade Jorba. Asimismo, cuentan con un nivel de apalancamiento mejor.

La analista ha destacado el buen momento que supone la coyuntura actual para invertir en renta fija emergente, que ofrece un retorno a final de año que puede alcanzar el 11% o 12%.

“Es el momento de entrar antes que el resto de inversores entren en la renta fija emergente”, concluye Nuria Jorba.