El pasado 9 de junio, el Banco Central Europeo incrementó los tipos de interés en 50 puntos básicos. Con ello, los intereses dejaban de estar en negativo, por primera vez tras 8 años. Posteriormente, la institución incrementó su postura ‘hawkish’, siguiendo los pasos de su homóloga americana, la Reserva Federal, y subió las tasas en […]
El pasado 9 de junio, el Banco Central Europeo incrementó los tipos de interés en 50 puntos básicos. Con ello, los intereses dejaban de estar en negativo, por primera vez tras 8 años. Posteriormente, la institución incrementó su postura ‘hawkish’, siguiendo los pasos de su homóloga americana, la Reserva Federal, y subió las tasas en 75 puntos básicos en la reunión de julio para después realizar el mismo movimiento en la reunión de septiembre.
Hace escasos días, Christine Lagarde, anunció una nueva subida de tipos de interés en 75 puntos básicos, la tercera consecutiva de la misma magnitud, tras finalizar la reunión del mes de octubre, ante una inflación “excesivamente elevada”.
Según apunta Schoders, los bancos pueden beneficiarse de las subidas en los intereses por parte de los bancos centrales ya que “sus modelos de negocios están orientados a que las pequeñas subidas en los tipos de interés puedan suponer un aumento drástico de los beneficios”. “Esto se debe a que el incremento de los ingresos se traslada a los resultados finales con un aumento mínimo de los costes”, señalan.
Víctor Alvargonzález, director de estrategia de la firma de asesoramiento independiente Nextep Finance, coincide con que las subidas de los intereses "multiplican el margen de negocio" de los bancos, que es "prestar dinero".
"Los créditos bancarios en EEUU son muy importantes para el negocio y se sitúan ya en el 7%", añade.
Desde la crisis financiera, los bancos se encuentran en una posición de mejora significativa de la rentabilidad. Sin embargo, según señala Schoders, el grado en el que cada banco se beneficia ante una subida de tipos no es uniforme en todo el sector. “Es una cuestión que depende de las diferencias en la combinación de ingresos, la velocidad de revalorización de los activos y el apalancamiento operativo”.
A medida que se han endurecido las subidas de los tipos de interés por parte del BCE, se ha acelerado el rebote del sector bancario dentro del Ibex 35, a lo que se suma que la institución ha dejado la puerta abierta ante futuros incrementos en estas tasas para las próximas reuniones.
Andy Evans, gestor de fondos de value europeo de Schroders, explica que “las perspectivas de los bancos son hoy más halagüeñas de lo que han sido durante mucho tiempo”.
Por su parte, Justin Bisseker, analista de bancos europeos de Schroders, afirma que "la última década muestra una clara relación entre la bajada de los tipos de interés” y el mal comportamiento de las cotizaciones de los bancos. La relación entre los tipos de interés y el rendimiento de las acciones de los bancos no se ha visto demasiado reflejada hasta el momento, pero añade que esto “será temporal y que ofrecerán una oportunidad a los inversores".
Según el analista de IG, Diego Morín, “el sector bancario continúa teniendo vaivenes en la bolsa española” favorecidos por el avance de los tipos de interés que lleva a cabo el BCE de manera agresiva.
Los resultados del tercer trimestre han sido positivos por el incremento de las tasas de interés, pero IG advierte que lo interesante también es “vigilar las proyecciones del sector al finalizar el año”, momento en el que la ralentización económica podría perjudicar a un sector que “rinde mejor en momentos de crecimiento económico”.
“Habrá que estar atentos a las provisiones que realicen los bancos españoles”, añade Morín. Otro aspecto a vigilar sería la tasa de morosidad, “que podría dispararse ante el momento de crisis en el que se encuentra la economía”.
Víctor Alvargonzález ha señalado que para los bancos comerciales "es bueno que suban los tipos", pero si los intereses "suben mucho" conllevan "una parte amarga" que es la disminución de la actividad económica y que podría desembocar en una recesión. "Si los créditos son más caros y la situación económica no es muy buena, disminuye la demanda de créditos para los bancos comerciales", ha concluido el director.
Si hacemos una radiografía de los principales bancos españoles, desde el momento en el que el BCE empezó a subir los tipos de interés, sus fortalezas y sus puntos más débiles son los siguientes:
El banco BBVA ganó 4842 millones de euros hasta septiembre, un 46,2% más que el obtenido hace un año. Para el tercer trimestre del año, el beneficio fue de 1841 millones de euros, superando las expectativas iniciales.
Sin embargo, según señala Diego Morín, de IG, “BBVA tiene dos puntos importantes a vigilar: la situación en el mercado argentino y turco que podrían condicionar sus ingresos en los próximos meses debido a una inflación disparada y el mercado mexicano que comienza a tener mejor comportamiento”.
Los títulos de la entidad han subido más de un 30% desde los mínimos de julio, acercándose a los 5,40 euros. Aunque en el balance anual, el valor apenas muestra cambios (+0,12%).
Los ingresos de Bankinter se situaron en 430 millones de euros en lo que llevamos de año, mientras que su beneficio para el 3T repuntó hasta los 159 millones de euros frente a los 110 millones del mismo trimestre del año anterior.
En este aspecto, Morín, destaca que es “interesante el aumento del margen de intereses hasta los 1066 millones”.
Las acciones de Bankinter suben más del 35% desde que comenzó el año y un 19% desde el pasado mes de julio, tras la primera subida de 75 puntos básicos por parte del BCE.
2.457 millones de euros fueron las ganancias que la entidad catalana logró sumar en los nueve primeros meses del año, lo que supone un 48,8% menos que el obtenido en el periodo anterior, con la fusión con Bankia.
Según Diego Morín, la atención para esta cotizada estará puesta en “si los títulos rompen máximos anuales”.
En cuanto a su comportamiento en bolsa, las acciones de CaixaBank se han revalorizado cerca de un 40% en el cómputo anual y un 9% desde el pasado mes de julio.
En comparación con los resultados del año anterior, las cuentas de Banco Santander han sido positivas ya que ha ganado desde enero hasta septiembre 7.316 millones de euros, un 25% más. Para el tercer trimestre, el grupo incrementó los beneficios en un 11%, con 2.422 millones de euros.
En este banco, el analista de IG, aprecia “un estancamiento de los títulos” con una ligerísima subida del 0,68%, desde el inicio de la subida de tipos en julio por parte del BCE y con caídas del 10% en el balance anual de las acciones. Morín, además, señala que en el caso del Banco Santander habrá que vigilar “Argentina y Brasil, que podrían condicionar a sus márgenes”.
Banco Sabadell registró ganancias de 709 millones de euros hasta el mes de septiembre, lo que se traduce en un 91% más que lo obtenido en el periodo anterior. En el tercer trimestre, el beneficio alcanzó los 317 millones de euros, es decir, un 76% más.
Desde el incremento de la agresividad por parte del BCE, las acciones han subido cerca de un 10% y la cotizada se revaloriza un 37% en lo que llevamos de año.