La situación para los inversores de renta fija se ha complicado en las últimas décadas, tanto que a veces hay quienes piensan que los bonos han dejado de ser un activo generador de rentas para las carteras de los inversores. Sobre todo, porque en algunos momentos del pasado ejercicio la cantidad de bonos con rentabilidades […]
DeudaLa situación para los inversores de renta fija se ha complicado en las últimas décadas, tanto que a veces hay quienes piensan que los bonos han dejado de ser un activo generador de rentas para las carteras de los inversores. Sobre todo, porque en algunos momentos del pasado ejercicio la cantidad de bonos con rentabilidades negativas llegó a superar los 15 billones de dólares. Una cantidad que se ha reducido recientemente, aunque nada indica que esta situación se vaya a superar en el corto plazo.
Sin embargo, las opciones existen, eso sí, ya no vale con añadir un bono soberano a la cartera. Los inversores deben acostumbrarse a salirse de su zona de confort y asumir que la rentabilidad, también en los bonos, exige algo de riesgo y altas zonas de cautela. El propio Hervé Hanoune, director de renta fija de Vontobel AM, señalaba que los próximos meses van a estar marcados por una combinación preocupante bajos tipos de interés y volatilidad.
Contar con inversión en renta fija
Todos los participantes de la jornada sobre renta fija de la gestora estaban de acuerdo. No hay que abandonar esta clase de activo, ni tan siquiera ahora que parece que los Bancos Centrales van a tener motivos más que de sobra para mantener los tipos bajos durante mucho tiempo. Una de esas razones es, explicaba el director de crédito de la gestora suiza, Mondher Bettaieb, la universalización de la tecnología 5G.
Para Felipe Villarroel, gestor de la boutique TwentyFour AM de Vontobel AM las opciones son varias, sobre todo en todas aquellas emisiones que siguen conteniendo la llamada prima del Brexit, una vez que parece que el peor de los escenarios se han descartado. También esperan que se comporten bien las emisiones de bonos subordinados financieros, sobre todo en banca. De hecho, son positivos con el sector sólo en renta fija y no en renta variable. Explica que el sector bancario es el que más está mejorando su rating a nivel global, si se observa la ratio mejoras/ rebajas de calificaciones crediticias, así como los CLO’s europeos.
Pero uno de los activos más valorados por varios de estos activos es la renta fija emergente, una clase que, eso sí, exigiría algo más de tolerancia al riesgo. Y eso que el especialista de inversión de la firma, Adrian Bender, considera que se trata de un sector en crecimiento y que sólo el año pasado al índice (que está compuesto por 73 países), se unieron cinco estados y que su capitalización aumentó en un billón de dólares.