El Gobierno plantea la subida de las cotizaciones de los salarios más altos para ayudar a hacer sostenible el sistema de pensiones. Al menos esa es la última propuesta que el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones ha presentado en las negociaciones del segundo bloque de medidas del paquete de reforma de las pensiones, […]
El Gobierno plantea la subida de las cotizaciones de los salarios más altos para ayudar a hacer sostenible el sistema de pensiones. Al menos esa es la última propuesta que el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones ha presentado en las negociaciones del segundo bloque de medidas del paquete de reforma de las pensiones, según ha adelantado Europa Press. El Gobierno continúa apostando por una política económica expansionista, buscando distintas fórmulas para aumentar más aún la recaudación.
Según los últimos datos disponibles, correspondientes a noviembre del año pasado, los ingresos por cotizaciones a la Seguridad Social aumentaron un 8,5% en comparación con el mismo mes de 2021. En tan solo doce meses, los contribuyentes han aportado 10.000 millones de euros más, hasta llegar a los 128.123 millones de euros. Pese al aumento de los ingresos, en noviembre de 2022 la deuda total de la Seguridad Social traspasó la barrera de los 100.000 millones de euros por primera vez en la historia, según datos publicados por el Banco de España.
Desde 2017, la deuda de esta entidad no para de crecer. Tras dos décadas estancada, en el último lustro el pasivo del sistema se ha multiplicado por seis. Esto se debe a que el Fondo de Reserva de la Seguridad Social, más conocido como la “hucha de las pensiones”, se quedó sin fondos ese año. Desde entonces, el sistema subsiste a base de transferencias de Hacienda y por ello, se están buscando fórmulas desde el Ejecutivo para intentar equilibrar las cuentas.
A las medidas que se aprueben en este segundo paquete de medidas, hay que añadir la entrada en vigor de dos reformas más. Por un lado, desde este 1 de enero, el Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI) aumenta las cotizaciones 0,6 puntos -0,5 a la empresa y 0,1 al trabajador- para nutrir el Fondo de Reserva de la Seguridad Social. Esta nueva tasa se implementará, al menos, durante la próxima década, aunque Bruselas ya pide extenderla hasta 2050 (para llegar a cubrir a la generación del baby boom).
También desde el inicio de año, los autónomos han visto entrar en vigor el nuevo sistema de cotizaciones basado en los ingresos reales que se declaren. Los trabajadores por cuenta propia podrán establecer la base de cotización mínima y máxima indicada en el tramo de ingresos que le corresponda. Pero este solo es el inicio de esta reforma: el resto se aplicará de manera progresiva entre 2024 y 2025. Dentro de dos años, aquellos que coticen por la base máxima pagarán 90 euros más de cuota. La idea es transformar el sistema de cotizaciones de los autónomos actual por uno basado en ingresos reales, que entraría en efecto de manera definitiva a finales de esta década.
Por último, en el primer paquete de medidas, que entró en vigor el uno de enero de 2021, se volvió a ligar la revalorización de las pensiones con el IPC, que se había desindexado previamente en 2013. También entraron en efecto nuevas penalizaciones y bonificaciones para desincentivar la jubilación anticipada y así aumentar la edad media a la que se empieza a recibir una pensión.