La pregunta sobre si se acerca una recesión se ha convertido en un tema de gran relevancia en los últimos tiempos. A pesar de las expectativas que apuntaban a una posible recesión a partir de 2022 o a principios de 2023, hasta el momento no se ha materializado. Sin embargo, diversos indicadores industriales muestran una […]
La pregunta sobre si se acerca una recesión se ha convertido en un tema de gran relevancia en los últimos tiempos. A pesar de las expectativas que apuntaban a una posible recesión a partir de 2022 o a principios de 2023, hasta el momento no se ha materializado. Sin embargo, diversos indicadores industriales muestran una clara desaceleración económica en muchas partes del mundo. Esto unido a las incertidumbres es algo que aborda Laurent Denize, global Co-CIO de ODDO BHF.
Esta pregunta parece haberse convertido en la del millón de dólares. En 2022 se daba por hecho que a la vuelta del verano o, como tarde, al inicio del 2023 el mundo viviría una recesión. Sin embargo, esta no ha llegado. “Lo que se ha visto es una clara desaceleración de la economía, que no ha llegado a convertirse en recesión por la respuesta masiva de consumo que la población mantuvo después del Covid”, asegura Laurent Denize, global Co-CIO de ODDO BHF. A pesar de haberla evitado, por el momento, “hay indicadores industriales que están claramente en recesión en muchos lugares del mundo”.
Al motivo de esa mayor demanda, también se une el fuerte comportamiento del mercado laboral. “Nadie se esperaba una tasa de creación de empleo del 2,6% en Estados Unidos y del 1,6% en Europa en el primer trimestre del año. Desde el Covid hemos vivido momentos en los que había más vacantes, que personas en búsqueda de empleo”, asegura el experto. A pesar de eso, el co-CIO de ODDO BHF cree que el desempleo aumentará.
Los otros aspectos positivos que han hecho que se esquive la recesión es que “la mayoría de las empresas en todos los sectores han aprovechado la inflación para aumentar los precios incluso más de lo que deberían para compensar. Esto ha impulsado los márgenes, por así decirlo”, agrega. A esto se añade, el hecho del gran estímulo fiscal.
Sin embargo, y a pesar de estos aspectos positivos, Denize asegura que las condiciones “van a empeorar”. “Las exigencias de capital por parte de los bancos han aumentado mucho. Esto significa que el consumo de crédito está disminuyendo y eso no es bueno para el crecimiento en el futuro, especialmente cuando uno de los sectores en riesgo es el sector inmobiliario” menciona.
“Cuando observamos la situación en Alemania o incluso en Europa, vemos que los nuevos pedidos están cayendo, y esto no es una buena noticia en el apalancamiento de las empresas. Esto es un problema. El segundo problema es el sector bancario, no en Europa, sino en Estados Unidos”, advierte. Por tanto, agrega que “esto significa que se avecinan tiempos difíciles para el sector inmobiliario y también para los bancos, ya que tienen pérdidas no realizadas y, lo diría alto y claro, la crisis bancaria en Estados Unidos no ha terminado”, explica Laurent Denize.
Por último, los otros riesgos que ve el experto de ODDO BHF se encuentra en la política monetaria del BCE. La señora Lagarde “empezó demasiado tarde a subir las tasas y luego podría prolongarlo demasiado y demasiado lejos, en un entorno que ha cambiado”, menciona.
En un escenario de incertidumbre como el actual y con esa desaceleración económica, Laurent Denize confía en las empresas de pequeña capitalización como una buena apuesta después de que los inversores hayan vuelto a las empresas más grandes dentro de la renta variable. “Una primera recomendación es moverse en términos relativos hacia las pequeñas empresas. ¿Por qué? Porque se están negociando con un descuento del 33% en comparación con el promedio histórico y están volviendo a los niveles vistos en 2008”, menciona. “Las pequeñas empresas están realmente baratas y creo que no hay oportunidad de dejarlas pasar”.
En la renta fija, el experto de ODDO BHF apuesta por la duración corta. “La duración corta significa un horizonte de inversión de 1 año y medio, y aquí puedes ver que el rendimiento es de alrededor del 5”, explica. Por ello, considera que es un activo interesante y atractivo dentro de la renta fija. En cuanto a los bonos soberanos “estamos en posición neutral debido a la posibilidad de una recesión que se pospone. Pero lo que hacemos es aumentar nuestra posición en productos de corta duración. Es ahí donde encontramos más atractivo”, señala.