La nueva gestora, que opera de facto desde el 31 de diciembre de 2019, persigue “el desarrollo de una oferta diferenciada de inversiones alternativas en mercados privados”. Con su puesta en marcha, persigue atender las necesidades de mayor rentabilidad de muchos clientes articulares e institucionales, al mismo tiempo que “respalda el crecimiento del sistema de producción con inversiones que benefician directamente a las empresas”, explica la compañía.

Este nuevo proyecto es uno de los puntos clave de la estratega de crecimiento de la parte de Asset Management del Grupo Intesa San Paolo y llega después del éxito de los fondos PIR y ELTIF. 

Desde Eurizon destacan que cuentan con un “un equipo de expertos en finanzas estructuradas dedicado a la gestión de activos alternativos y la creación de productos especializados en ABS y préstamos apalancados (leveraged loans)”. Además, aumentarán su cobertura sobre inversiones poco líquidas. 

Eurizon Capital Real Asset es, en la práctica, una joint venture participada al 51% por Eurizon Capital SGR y al 49% por Intesa Sanpaolo Vita. De momento, cuenta con activos por 3.400 millones de euros, capital delegado por ésta última y sus competencias abarcan el private equity, la deuda privada, infraestructuras y bienes inmobiliarios. 

Para Tommaso Corcos, consejero delegado de Eurizon, “los activos alternativos siguen creciendo a un ritmo interesante y esperamos que representen un porcentaje cada vez mayor del ahorro global”.