El Boletín Oficial de la Provincia de Barcelona ya ha publicado el acuerdo de la suspensión. Según informan desde el Ayuntamiento de Barcelona, se abre "un proceso de reflexión y participación para elaborar un Plan Especial de Regulación de Alojamientos Turísticos". El documento incluirá los criterios para una gestión global de los alojamientos y del […]
Dirigentes Digital
| 02 jul 2015
El Boletín Oficial de la Provincia de Barcelona ya ha publicado el acuerdo de la suspensión. Según informan desde el Ayuntamiento de Barcelona, se abre "un proceso de reflexión y participación para elaborar un Plan Especial de Regulación de Alojamientos Turísticos". El documento incluirá los criterios para una gestión global de los alojamientos y del turismo "que permita preservar la calidad de Barcelona como destino turístico".
Desde el Ayuntamiento, explican que el objetivo de esta medida es evaluar la oferta turística existente y el impacto, tanto económico como social, que tiene sobre el acceso a la vivienda, ocupación del espacio público, movilidad, diversidad de usos y producción y gestión de residuos.
Tras la suspensión, el Gobierno Municipal anuncia "un periodo con todos los actores del sector, para lo cual establecerán "espacios que promuevan el debate y el diálogo". Para ello, explican que también se tendrán en cuenta las experiencias de otras ciudades turísticas europeas. Según sus previsiones, esperan tener una propuesta inicial de ese Plan Especial de Regulación de Alojamientos Turísticos para el primer trimestre del año próximo, por lo que la suspensión durará un año.
El Gobierno de Colau defiende que "Barcelona debe aprovechar la importante fuente de riqueza que produce el turismo", en torno al 14% del PIB de la ciudad, pero que esa actividad no debe ser incompatible con la vida del ciudadano ni provocar externalidades negativas.
Para la construcción de este nuevo plan turístico, el Ayuntamiento explica que tendrá en cuenta las iniciativas que supongan un reparto equitativo de los beneficios turísticos entre todos los barrios de la ciudad, así como medidas para descongestionar las zonas sometidas a más presión ambiental y social. Además, "se trabajará para mantener intactos los rasgos distintivos que dan carácter singular en la ciudad, como la identidad propia de cada barrio y el comercio de proximidad", concluyen desde el Ayuntamiento.