A lo largo del año el precio de la acción de Iberdrola ha experimentado una notable subida, a pesar de las condiciones tan complicadas que atraviesan sus dos mercados principales, España y Reino Unido. Los analista de Alphavalue recomiendan recortar la exposición hasta los 7,23 euros por acción y por ello realizan el siguiente análisis: […]
Dirigentes Digital
| 07 jul 2017
A lo largo del año el precio de la acción de Iberdrola ha experimentado una notable subida, a pesar de las condiciones tan complicadas que atraviesan sus dos mercados principales, España y Reino Unido. Los analista de Alphavalue recomiendan recortar la exposición hasta los 7,23 euros por acción y por ello realizan el siguiente análisis: El impacto negativo se ha visto sobre todo en la parte de generación y suministro, donde el beneficio de dicha división se ha reducido un -32% yoy (en Reino Unido lo hicieron en un -75% yoy, mientras que en España en un -19% yoy) sobre todo por la menor actividad (load factor) lo que a su vez dio lugar a menores márgenes. A esto hay que sumar además la menor producción hidroeléctrica y los mayores costes de transmisión. Debido a las dificultades del entorno y a los mayores costes en Reino Unido, la filial británica de Iberdrola, Scottish Power, decidió subir las tarifas (al igual que el resto de las llamadas “Big Six”), para intentar recuperar así algo del terreno perdido y alcanzar los objetivos de crecimiento previstos para 2017. En el caso de España, no esperamos que vayan a llevar a cabo ninguna medida en lo que respecta a subida de tarifas, aunque sí seguirán con el proceso de optimización de costes con el objetivo de mantener la tendencia de beneficios. Nuestra opinión es que esa caída del -5% yoy en beneficio neto, no solo no va a ser difícil de recuperar sino que va a comprometer mucho el objetivo de crecimiento de mid single digit previsto para el conjunto del año (estacionalmente el 1T17 es el trimestre más fuerte del año). Por valoración la española ofrece un +8% de upside hasta nuestro precio objetivo, además de seguir siendo uno de nuestros top picks del sector gracias a la calidad de sus activos, las expectativas de crecimiento y el posicionamiento que tiene dentro de una industria que se encuentra en pleno proceso de transición. A pesar de que a corto plazo podemos ver algo de presión por el tema de los objetivos, nuestra visión se basa en el largo plazo (nuestra valoración por DCF ofrece aún un potencial del +13%, y eso que tenemos unas expectativas de crecimiento más conservadoras que las de la propia compañía). En resumen, una historia que hay que comprar o incrementar la posición en el momento en el que muestre cualquier momento de debilidad. Por último, los recientes movimientos de la acción nos han llevado hoy a subir un peldaño la recomendación