Desafiando la volatilidad de los bonos del Tesoro de Estados Unidos, la deuda pública mundial cerró el primer trimestre en positivo después de coberturas, apoyada por la fortaleza de la deuda de la periferia del euro. De ahora en adelante, tal y como explica el equipo especializado en renta fija de Fidelity, siguen apostando por “una postura […]
Dirigentes Digital
| 27 abr 2018
Desafiando la volatilidad de los bonos del Tesoro de Estados Unidos, la deuda pública mundial cerró el primer trimestre en positivo después de coberturas, apoyada por la fortaleza de la deuda de la periferia del euro. De ahora en adelante, tal y como explica el equipo especializado en renta fija de Fidelity, siguen apostando por “una postura en duración entre neutral y ligeramente positiva en un momento en el que los rendimientos siguen moviéndose en una banda estrecha”. Un aspecto importante es que la deuda pública recuperó sus atributos de refugio durante las últimas semanas, cuando “se reavivaron los riesgos geopolíticos, y esperamos que la duración siga siendo un diversificador útil frente a la deuda corporativa y los activos de crecimiento”. En lo que respecta a los bonos estadounidenses, la gestora opera que los riesgos se orientan hacia un ritmo más lento de endurecimiento monetario, a medida que la economía se ralentice y la normalización del balance se acelere a lo largo de 2018. En el plano técnico, el deterioro de las cuentas públicas y el refuerzo del endurecimiento cuantitativo darán lugar a riesgos en el plano de la oferta durante el año. “En general, esperamos que los rendimientos de los bonos del Tesoro coticen en una banda estrecha durante el resto de 2018, pero tendiendo a un descenso”, afirman estas fuentes. En la zona euro, el reciente aplanamiento de la curva ha mermado un tanto el atractivo de la duración en euros, pero el mercado sigue siendo atractivo frente a otros. Pese a que la deuda de los países de la periferia se ha anotado un buen comportamiento durante los últimos meses (Italia está ofreciendo un diferencial aparentemente atractivo frente a España), Fidelity aprecia un descenso de los diferenciales y que gran parte de las buenas noticias están descontadas, por lo que ahora es neutral en esta clase de activos. En el Reino Unido, Fidelity opina “los riesgos económicos a medio plazo siguen orientados a la baja y podrían dar lugar a descensos en los rendimientos de los Gilts, pero recomienda infraponderar en duración desde la óptica de la valoración relativa“.