La sucesión: La teoría dice que será el último mandato de Rajoy, por lo menos es lo que ha manifestado en alguna ocasión y estar bien posicionado será clave para dentro de cuatro años. En la carrera para liderar el partido se encuentra María Dolores de Cospedal y Soraya Sáenz de Santamaría. Rajoy ha sido […]
Dirigentes Digital
| 03 nov 2016
La sucesión: La teoría dice que será el último mandato de Rajoy, por lo menos es lo que ha manifestado en alguna ocasión y estar bien posicionado será clave para dentro de cuatro años. En la carrera para liderar el partido se encuentra María Dolores de Cospedal y Soraya Sáenz de Santamaría. Rajoy ha sido salomónico y ha mantenido un equilibrio. La vicepresidenta mantiene el poder en el Gobierno y la número dos del PP seguirá como secretaria de partido y como ministra de Defensa, aunque con competencias laminadas sin el CNI, que seguirá en manos de Sáenz de Santamaría. Economía: La prioridad de Rajoy será la política económica. El presidente siempre ha mostrado su satisfacción por el tándem Montoro-Guindos, a pesar de las tensiones internas por las competencias. De Guindos negocia y Montoro ejecuta, poli bueno y poli malo. Las primeras urgencias serán retocar los presupuestos y negociar con Bruselas los ajustes de 5.100 millones. Guiños: lo del Gobierno paritario no es para Rajoy. Solo cinco mujeres forman parte de los 13 puestos del Ejecutivo. Con lo que sí ha cumplido ha sido con el gesto con Cataluña al contar con Dolors Montserrat como ministra de Sanidad, aunque sea una cartera menor y casi sin competencias al estar transferidas. El agujero de Soria: la salida anticipada de José Manuel Soria obligó a Luis de Guindos a asumir la cartera de Industria. El ministro de Economía mantiene entre sus competencias esta cartera, pero sin Energía ni Turismo, que será dirigido por Álvaro Nadal con el único Ministerio remodelado. Menos trabajo para Sáenz de Santamaría: La vicepresidenta del Gobierno seguirá siendo la número dos, pero ya no la veremos todos los viernes despachando a la prensa y afrontando todas las crisis. Abandona la portavocía que será Méndez de Vigo. Pero asume la responsabilidad de Administraciones Territoriales, que antes estaba en Hacienda. Es decir, bajo su responsabilidad estará el desafío nacionalista de Cataluña y la posible reforma de financiación autonómica, con un perfil mucho más político que Montoro.