El fondo AXA IM Maturity 2023 se ofrece a inversores particulares e institucionales en Bélgica, Francia y España. En Italia y el Reino Unido, y está disponible únicamente para inversores institucionales. Invierte principalmente en activos de renta fija que, tal y como recuerdan desde la gestora, conllevan un riesgo de pérdida del capital invertido. El equipo […]
Dirigentes Digital
| 16 mar 2017
El fondo AXA IM Maturity 2023 se ofrece a inversores particulares e institucionales en Bélgica, Francia y España. En Italia y el Reino Unido, y está disponible únicamente para inversores institucionales. Invierte principalmente en activos de renta fija que, tal y como recuerdan desde la gestora, conllevan un riesgo de pérdida del capital invertido. El equipo construirá una cartera diversificada de bonos high yield europeos al inicio del periodo de inversión, con títulos que en, su opinión, tengan sólidos fundamentales empresariales. El gestor pretende mantener los títulos durante el periodo de vigencia del fondo, aunque aplicará unos rigurosos criterios de venta a cualquier posición en el caso de que se deterioren los fundamentales crediticios de un emisor. El fondo tratará de aprovechar al máximo los rendimientos con el menor coste posible; para ello, se reducirá al mínimo la rotación y, por tanto, los costes de transacciones. Al final del periodo de inversión, en 2023, el fondo se liquidará automáticamente y todos los bonos se reembolsarán o venderán, si no se han producido impagos. Con motivo del lanzamiento, Yves Berger, gestor de fondos senior de AXA IM, recuerda cómo el mercado de bonos high yield europeos ha experimentado un fuerte crecimiento desde 2009. “Ahora, es una clase de activos valorada en aproximadamente 350.000 millones de euros y cuenta con una base de emisores cada vez más diversificada”. Tal y como indica, “la estrategia que desarrollaremos con este fondo es invertir en títulos que creemos que pueden mantenerse en cartera durante el periodo de vigencia del producto y diversificar la cartera todo lo posible para reducir al máximo el riesgo de impago”. A su juicio, actualmente resulta prácticamente imposible acertar con los tiempos del mercado, así que el enfoque de inversión con un vencimiento determinado “pretende ayudar a los clientes a afrontar los retos que plantean unos tipos bajos y unos mercados volátiles“. “Manteniendo la inversión durante todo el periodo de seis años de vida del fondo, los inversores pueden prestar menos atención a los movimientos pasajeros de los precios. El fondo está diseñado para mantener la inversión hasta la fecha de vencimiento. Los reembolsos anticipados estarán sujetos a una comisión del 2%”. explican desde AXA IM. Por su parte, Chris Iggo, Director de Inversiones del área de Renta Fija de la firma, explica que el high yield europeo sigue siendo uno de los pocos lugares donde los inversores pueden seguir encontrando rendimientos atractivos. “Dado que los tipos de interés van a permanecer en niveles bajos en Europa, los inversores que busquen rentabilidades totales más altas y que deseen asumir más riesgo podrían considerar la inversión en esta clase de activos dentro de un ejercicio de diversificación de sus fuentes de rentas”, asegura. Desde la gestora indican que también han notado un creciente interés por parte de los inversores españoles en productos de renta fija de alto rendimiento, en busca de una rentabilidad que cada vez más les cuesta encontrar en los activos más tradicionales. “Sin embargo, los inversores demandan también una mayor visibilidad de la rentabilidad que cabe esperar en este tipo de inversiones. Y precisamente eso es lo que les ofrece este fondo, la tercera edición que llega tras el éxito que han tenido en nuestro mercado las dos primeras ediciones de nuestro fondo Maturity“, aseguran. AXA IM es una de las mayores gestoras de carteras de bonos high yield, con un patrimonio total invertido en esta clase de activos de 27.700 millones de euros (a 30 de septiembre de 2016, fuente: AXA IM). El equipo, formado por cinco especialistas en bonos de alto rendimiento europeos, gestiona actualmente más de 4.100 millones de euros (a finales de diciembre de 2016) invertidos en esta clase de activos.