Los resultados de Bankia han alentado a sus dirigentes a marcarse objetivos ambiciosos. Entre sus planes está la devolución de cerca de 2.500 millones de euros en dividendos a sus accionistas en el periodo que cubre su Plan Estratégico (2018-2020). Esta cantidad representaría entre un 45% y un 50% de los beneficios previstos de Bankia. […]
Dirigentes Digital
| 27 feb 2018
Los resultados de Bankia han alentado a sus dirigentes a marcarse objetivos ambiciosos. Entre sus planes está la devolución de cerca de 2.500 millones de euros en dividendos a sus accionistas en el periodo que cubre su Plan Estratégico (2018-2020). Esta cantidad representaría entre un 45% y un 50% de los beneficios previstos de Bankia. Ello será posible gracias a un aumento de las ganancias, que en el último año alcanzarían los 1.300 millones de euros. El final de las restricciones del plan de restructuración ha contribuido a que las previsiones del banco sean optimistas con respecto a sus posibles resultados. En cambio, hay que precisar que la cifra final que se reparta tendrá que ver con los dividendos ordinarios, por una parte, y también con unos dividendos extraordinarios en caso de que se produzca un exceso de capital sobre el 12% CET1 fully loaded. De hecho, en la presentación del Plan Estratégico, Ignacio Goirigolzarri, presidente de la entidad, ha explicado que aún no han contemplado cómo se repartirían las retribuciones a accionistas en el caso de que exista un exceso de capital. La idea es valorar en cada momento si se dan las circunstancias para poder realizar esos pagos y decidir cómo hacerlos. Sin embargo, precisa que la intención del banco es trabajar “con la idea de devolver todas las ayudas”. En el supuesto de que se cumplan las previsiones de la entidad, el estado percibiría 1.500 millones de euros si se mantiene la participación actual del 60%. De esta forma, junto a los 2.865 millones que ya han retornado al estado, Bankia habría devuelto cerca del 19,5% de las ayudas que recibió en su rescate (22.424 millones de euros). Se trata de una situación poco probable, dado que la entidad prevé estar compuesta al 100% por capital privado a finales de 2019. Goirigolzarri considera la privatización de Bankia un aspecto “muy importante” para la entidad y asegura que “hay apetito por Bankia” de cara a futuras privatizaciones. Así, aunque la devolución al estado no se produciría por los retornos de las acciones, tendría lugar por la privatización de paquetes accionariales que el FROB determinará en los próximos meses. En caso de que se adelante la privatización y no se alcance a devolver las ayudas en su totalidad, el presidente argumenta que la privatización ha tenido unos efectos muy positivos. En esa línea, en cuanto a una posible fusión o compra por parte de otro banco, Goirigolzarri explica que no tiene “en la mesa ninguna operación corporativa”. En relación al futuro del banco, precisa que la actividad principal se producirá en España. “No vamos a internacionalizarnos, nuestro target debe ser España”, ha detallado Goirigolzarri. También esperan realizar una importante inversión en tecnología que mejore la eficiencia y que haga de la fusión con BMN una relación efectiva. Se cifra una cantidad de 1.000 millones de euros en los próximos tres años, en comparación con los 700 millones que invirtieron en los tres años precedentes.