Los inversores se beneficiarán de la estrategia llevada a cabo por Michael Krautzberger y su equipo, que gestionan el BGF Euro Bond Fund, la estrategia gemela con la que obtuvieron el premio Morningstar al Gestor de renta fija europea del año 2016. Es el único equipo que ha conseguido este galardón en dos ocasiones. El […]
Dirigentes Digital
| 01 sep 2016
Los inversores se beneficiarán de la estrategia llevada a cabo por Michael Krautzberger y su equipo, que gestionan el BGF Euro Bond Fund, la estrategia gemela con la que obtuvieron el premio Morningstar al Gestor de renta fija europea del año 2016. Es el único equipo que ha conseguido este galardón en dos ocasiones.
El BSF Sustainable Euro Bond Fund invierte en una amplia gama de activos para generar alfa e impulsar la rentabilidad total del vehículo, centrándose principalmente en bonos Investment Grade denominados en euros. Se hace especial hincapié en la diversificación, siendo riesgo activo repartido entre selección de países, sectores, títulos, duración, posicionamiento en la curva, así como una gestión flexible de la exposición a divisas.
Michael Krautzberger, responsable del equipo de renta fija europea de la firma, explica que "la inversión sostenible se está imponiendo, ya que los inversores de todo el mundo están dando más importancia a la transparencia y quieren que sus inversiones respondan a criterios ESG. Considerar estos factores se percibe como un signo de fortaleza operativa, eficiencia y gestión a largo plazo de los riesgos financieros de las compañías y gobiernos en los que invertimos".
Los gestores prevén una mayor presencia de bonos verdes en este fondo, en comparación con las estrategias que no contemplan factores ESG. "Además de la capacidad de lograr objetivos de inversión específicos en materia medioambiental, social y de gobierno corporativo, las empresas con puntuaciones ESG elevadas y, sobre todo, aquellas que destacan en el último de los criterios suelen protagonizar menos sorpresas negativas", explica Krautzberger.
BlackRock gestiona activos de renta fija por valor de más de 1,4 billones de dólares para clientes internacionales en estrategias de gestión tanto activas como pasivas. En febrero de 2015, BlackRock confió a Deborah Winshel la labor de unificar su enfoque en materia de impact investing con el lanzamiento de BlackRock Impact, la plataforma global de la compañía destinada a inversores con objetivos sociales o medioambientales. El lanzamiento pone de manifiesto el compromiso de BlackRock con este tipo de estrategias y permite a los inversores acceder a una plataforma que actualmente gestiona activos por valor de 200.000 millones de dólares entre vehículos de impact investing, ESG, y carteras monitorizadas.