La yihad islámica se está mostrando a occidente con mil caras. La matanza de Charlie Hebdo es solo una forma más de como grupos terroristas intentan imponer su Estado terror. Uno de ellos Boko Haram que actúa al norte de Nigeria está lanzando una fuerte ofensiva contra el Estado y la población civil. Este fin de semana ha perpetrado tres atentados en Potiskum, al noreste del país. El domingo al menos cinco personas han fallecido en un mercado de Potiskum, en el norte de Nigeria, después de que los terroristas colocaran chalecos explosivos a dos niñas de unos 10 años.
El sábado se produjeron otros dos ataques. Al menos 20 personas fallecieron y otras 18 resultaron heridas en un ataque suicida con una bomba perpetrado supuestamente por una menor de 10 años en un mercado de la localidad nigeriana de Maiduguri, en el estado norteño de Borno.
Boko Haram captó la atención mediática de occidente con el secuestro de 200 niñas el año pasado. El grupo ha adoptado está táctica para adoctrinar a las pequeñas a su causa. Según los expertos, el rapto de mujeres persigue un doble objetivo: ponerlas a disposición de sus tropas y utilizarlas en atentados como ha sucedido este fin de semana, porque levantan menos sospechas al atacar a sus objetivos.
Esta semana la ONG Amnistía Internacional alertaba que Boko Haram ha atacado la ciudad de Baga el noreste de Nigeria disparando indiscriminadamente contra la población y quemando viviendas. Fuentes del Gobierno cifran las víctimas en cientos, pero la ONG calcula que podrían llegar a 2.000 personas