La Unión Bancaria Europea, que entró vigor a finales del año pasado, establece que ya nunca más los contribuyentes se harán cargo de los desastres financieros de los bancos. Los rescates de las que se han visto en los últimos años a cargo de los Estados han tocado a su fin. El propio sector, accionistas […]
Dirigentes Digital
| 03 mar 2015
La Unión Bancaria Europea, que entró vigor a finales del año pasado, establece que ya nunca más los contribuyentes se harán cargo de los desastres financieros de los bancos. Los rescates de las que se han visto en los últimos años a cargo de los Estados han tocado a su fin. El propio sector, accionistas y acreedores se responsabilizarán de las pérdidas o de los reflotes.
El primer banco al que se le va a aplicar la medida será el Hypo Alpe que fue nacionalizado en 2009 con 5.500 millones. A pesar de la inyección de capital y las medidas adoptadas como la segregación de sus activos tóxicos no han conseguido que el banco vuelva a ser rentable. Su banco malos, Heta Asset Resolution, donde se aglutinaron todos los activos perjudiciales han provocado un agujero de 7.600 millones.
El Gobierno austriaco ha decido aplicar los mecanismos establecidos en la Unión Bancaria y aplicar la nueva Directiva de Resolución y Recuperación Bancaria, por la cual sus accionistas y acreedores serán los responsables de asumir las pérdidas ocasionadas.
La Autoridad de Supervisión del Mercado Financiero de Austria (FMA) ha ordenado al citado ‘banco malo’ suspender todos los pagos hasta mayo de 2016, para ordenar su pasivo, con lo que en la práctica supone la reestructuración de su deuda y posterior liquidación.
Se da la circunstancia que el Estado es uno de sus principales accionistas por lo que también asumirá pérdidas, cosa por la que el país ha perdido recientemente la máxima calificación crediticia de su deuda. Entre los principales acreedores se encuentran varios fondos de inversión entre ellos Pimco, Deutsche Bank AG y UBS.