Según datos de JP Morgan AM, el 72% de las empresas del Euro Stoxx 600 ya han presentado sus resultados de cierre de año, estimando estos expertos un crecimiento de los beneficios por acción (BPA) en el cuarto trimestre de 2016 del 9,3% interanual para las compañías del índice. “Resulta alentador el hecho de que […]
Dirigentes Digital
| 06 mar 2017
Según datos de JP Morgan AM, el 72% de las empresas del Euro Stoxx 600 ya han presentado sus resultados de cierre de año, estimando estos expertos un crecimiento de los beneficios por acción (BPA) en el cuarto trimestre de 2016 del 9,3% interanual para las compañías del índice. “Resulta alentador el hecho de que la subida de los beneficios se haya debido a una mejora generalizada de ocho de diez sectores y que tan solo la energía y la tecnología hayan registrado un crecimiento negativo en el cuarto trimestre”, indican desde la firma, recordando que los del sector energético, aunque negativos, “comienzan a lastrar menos el crecimiento de los beneficios regionales, gracias a que el precio del petróleo continúa su recuperación”. Desde la firma consideran que pese a haber experimentado un fuerte repunte en el cuarto trimestre, las actuales perspectivas de inflación y crecimiento para 2017 favorecen a los sectores cíclicos en detrimento de los defensivos. “La subida de las tires de los bonos y el progreso de los problemas de la banca italiana han aliviado la presión que sufría la banca europea. Sin embargo, mantenemos una actitud cauta debido al potencial de volatilidad de origen político”; indican. En este sentido, señalan directamente al sector financiero, que representa más del 20% de los mercados de renta variable europea. Explican los expertos cómo los beneficios se vieron impulsados en el cuarto trimestre no solo por la subida de las tires de los bonos en todo el mundo, sino además por los ingresos de trading así y los márgenes netos por intereses. Sin embargo, advierten que “es probable que el sector financiero se utilice como indicador del riesgo político en 2017 y que un calendario electoral concurrido e incierto en los próximos meses genere volatilidad entre los bancos europeos”. Así, consideran que las previsiones son demasiado optimistas. “Las previsiones para el crecimiento de los beneficios europeos en 2016 arrancaron el año en el 7%, para después ir cayendo a medida que el crecimiento de los beneficios no llegaba a materializarse. Creemos que existen unos vientos de cola que apuntan a un crecimiento de los beneficios decente en Europa en 2017; sin embargo, nos decantamos más por unas estimaciones del 5-9%”, indican. Ago más optimista se muestra Richard Turnill desde BlackRock, al explicar que la mejora en las perspectivas de crecimiento apuntalará esta tendencia positiva en los beneficios, sobre todo en Europa y Japón. “Los alentadores resultados empresariales a nivel global confirman que los beneficios de la reactivación económica (aumento de salarios, crecimiento e inflación) van más allá de Estados Unidos. Además, creemos que hay margen para un mayor aumento de los beneficios empresariales, especialmente en Europa y Japón”, indica el experto.