Cellnex cierra marzo con pérdidas de 35 millones

La operadora de infraestructuras de telecomunicaciones Cellnex Telecom ha anunciado este viernes que ha cerrado el primer trimestre de 2018 con pérdidas de 35 millones de euros, frente a los 11 millones de ganancias registrados en el mismo periodo del año anterior. La compañía ha señalado que su retroceso se debe al expediente de regulación de empleo (ERE) que acometió en sus filiales españolas Tradia y Retevisión, en las que pactó el pasado marzo un plan de prejubilaciones y bajas incentivadas para 2018 y 2019 que les obligó a realizar una provisión por 55 millones. Cellnex ha asegurado que, sin tener en cuenta estas provisiones, su beneficio habría alcanzado los 11 millones de euros, al igual que en el primer trimestre de 2017. Además, ha destacado que el alza de un 14,8% en sus ingresos, que han alcanzado los 217 millones de euros, y el repunte de un 20,7% en su resultado bruto de explotación (Ebitda) hasta los 101 millones. Por otro lado, su deuda neta hasta marzo creció en 44 millones, un avance del 2% interanual, hasta dejar su total de pasivo en 2.281 millones, con un ratio anualizado de 5,6 veces Ebitda. La estructura de la deuda de la multinacional catalana es en un 79% a tipo fijo, con un coste medio de la deuda dispuesta del 2,2%, y la vida media es de 6,1 años. El director financiero de Cellnex Telecom, José Manuel Aisa, ha señalado que los resultados de su compañía son “pérdidas buenas” tanto para la empresa como para los trabajadores, que se pueden acoger de manera voluntaria a un plan de bajas incentivadas o a un plan de prejubilaciones, e indican que “la empresa va en una dirección de creación de valor para el accionista”. Las inversiones operativas en los primeros tres meses de 2018 alcanzaron los 37 millones de euros, y se emplearon mayoritariamente en el mantenimiento de la capacidad instalada y a inversiones vinculadas a generación de nuevos ingresos y mejoras en la eficiencia. Al cierre del primer trimestre, Cellnex contaba con un total de 21.757 emplazamientos, de los que 8.136 están en España, 7.990 en Italia y 5.631 en Holanda, Francia, Reino Unido y Suiza, a los que se suman 1.363 nodos y que han crecido un 20% este trimestre respecto al mismo periodo del año anterior. Asimismo, un 47% de los ingresos y un 50% del Ebitda se generan fuera del mercado español, lo que supone un avance frente al 39% que representaban ambos hace un año, mientras que Italia es el segundo mercado más importante con un 29% de los ingresos. Por líneas de negocio, los servicios de infraestructuras para operadores de telecomunicaciones móviles elevaron su aportación a los ingresos totales hasta el 64% con 139 millones de euros, un 28% más respecto al primer trimestre de 2017. La actividad de infraestructuras de difusión aportó un 27% de los ingresos con 58 millones de euros, mientras que el negocio centrado en las redes de seguridad y emergencia y soluciones para la gestión inteligente de infraestructuras urbanas aportó un 9% de los ingresos con 19 millones de euros.