Los secretarios generales de CCOO. y UGT, Ignacio Fernández Toxo y Cándido Méndez, y los presidentes de CEOE y Cepyme, Juan Rosell y Antonio Garamendi, han vuelto a reunirse, ‘al más alto nivel’, para intentar desatascar el pacto salarial para el periodo comprendido entre 2015 y 2017 después de que hace cerca de un mes […]
Dirigentes Digital
| 23 mar 2015
Los secretarios generales de CCOO. y UGT, Ignacio Fernández Toxo y Cándido Méndez, y los presidentes de CEOE y Cepyme, Juan Rosell y Antonio Garamendi, han vuelto a reunirse, ‘al más alto nivel’, para intentar desatascar el pacto salarial para el periodo comprendido entre 2015 y 2017 después de que hace cerca de un mes asumieran en persona las negociaciones.
Sin embargo, este encuentro lejos de crear un clima de esperanza de cara al acuerdo definitivo, no invita precisamente al optimismo. Al parecer, los empresarios siguen sin ceber en su posición de puesta por la contención salarial y los sindicatos continúan rechazando todo acuerdo que no suponga un mayor crecimiento de los salarios.
La última propuesta conjunta de CCOO y UGT abogaba por una subida del 1,5% en 2015 si el PIB superaba un crecimiento del 2% y, en el caso de que creciera menos, el aumento de los sueldos se quedaría en el 1%. Para 2016, los sindicatos apostaban por incrementos de hasta el 2% en caso de que el PIB superara las tasas del 2,5%.
Como informó DIRIGENTES hace apenas dos semanas, por su parte, el presidente de la CEOE, Juan Rosell, ofreció una subida de los salarios para este año que rozaría el 0,9%. Para 2016, el repunte sería del 1,3%. El presidente de CEOE, Juan Rosell, aseguró entonces que estaban haciendo un "planteamiento de prórroga del convenio anterior, con una evolución de los salarios de hasta el 0, 0,8%, 0,9%", incluso podrían subir algo más en el 2015, añadió.
El escenario que plantea Rosell para 2016 contempla unos salarios que podrían crecer "hasta el 1,2%, el 1,3%, en función de las características de los sectores y subsectores". Además, el responsable de la patronal señaló que estamos en una situación posibilista, en línea con lo que está haciendo Europa.