En 2015, fueron 38 las entidades afincadas en España sobre las que el supervisor advirtió al mercado. Y la cifra supera el centenar si se incluyen las domiciliadas en el extranjero. Una plaga que, lejos de temer la persecución de los reguladores, campa a sus anchas por el mercado dejando, casi siempre, al minorista como […]
Dirigentes Digital
| 16 mar 2016
En 2015, fueron 38 las entidades afincadas en España sobre las que el supervisor advirtió al mercado. Y la cifra supera el centenar si se incluyen las domiciliadas en el extranjero. Una plaga que, lejos de temer la persecución de los reguladores, campa a sus anchas por el mercado dejando, casi siempre, al minorista como la principal víctima de las promesas y altas rentabilidades que finalmente, serán incumplidas.
Entre las firmas de origen nacional, este año la CNMV ha detectado diez casos de chiringuitos financieros. Empireoption.com, Safelik.com, BKTrading.com, First Business Orientation, financika.com, Landmark Trade LTD, Green Investment House, OSB Consultores Asociados, Citrades.com y TraderFXcapital.com.
"Los elevados rendimientos que ofrecen suelen ser demasiado buenos para ser ciertos: sólo son el cebo con el que consiguen que los inversores menos informados o más confiados les entreguen sus ahorros. Cuando no pueden justificar las pérdidas, simplemente desaparecen o cambian de nombre. Es decir, no se trata de entidades más o menos solventes o con mayores o menores habilidades en la gestión financiera. Sencillamente, son estafadores", recuerdan desde la CNMV.
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Los canales que utilizan para contactar con sus potenciales víctimas son los tradicionales. Vía teléfono, cartas, páginas web, e incluso a través del correo electrónico. "La normativa vigente establece que las comunicaciones comerciales deben identificarse como tales y prohíbe su envío por correo electrónico salvo que hubieran sido previamente solicitadas o expresamente autorizadas por el destinatario", advierten los expertos.
Para obtener los contactos recurren a bases de datos, a menudo de forma fraudulenta. Y sus técnicas de persuasión son variadas, siempre destacando factores como el éxito a la hora de conseguir altos rendimientos o el uso de muchos tecnicismos en sus informaciones. El consejo general es claro: "si ofrece mucha rentabilidad con poco riesgo, no se fíe".
La principal protección frente a un chiringuito financiero es identificarlo como tal. Y una vez la sospecha se materialice, el inversor tiene a su alcance los siguientes mecanismos de protección. Desde pedir información a la CNMV hasta identificar ciertas peculiaridades que caracterizan a estas entidades. Hay que tener en cuenta factores como que la actividad de los chiringuitos se enmascara bajo la apariencia de contratos de asesoramiento, en los que a cambio de las "recomendaciones" se cobra al cliente un elevado porcentaje de la inversión.