2016 acabó con nuevos máximos para la industria de ETFs con entradas netas por importe de 280.000 millones de dólares y desde Natixis Global AM auguran que este recién nacido 2017 la “actividad en este universo de inversión continuará”. De hecho, la firma llama la atención sobre cinco posibles tendencias a tener en cuenta a […]
Dirigentes Digital
| 26 ene 2017
2016 acabó con nuevos máximos para la industria de ETFs con entradas netas por importe de 280.000 millones de dólares y desde Natixis Global AM auguran que este recién nacido 2017 la “actividad en este universo de inversión continuará”. De hecho, la firma llama la atención sobre cinco posibles tendencias a tener en cuenta a medida que avance el ejercicio. Primero, destacan sus expertos, es que los ETFs activos transparentes pueden “despertar una mayor atención”, gracias a su eficiencia fiscal y a su flexibilidad a la hora de negociarse. Muchos publican online su cartera de forma diaria y, además, se operan de forma semejante a los valores individuales bursátiles (pueden ser comprados y vendidos a lo largo de la sesión). Por otra parte, creen que los ETFs de renta variable internacional podrían volver a “ganarse el favor de los inversores”. La escalada protagonizada por Wall Street, disparada aún más desde la elección de Donald Trump como presidente, podrían llevar a muchos participantes del mercado a mirar más allá de Estados Unidos ante las elevadas valoraciones y para diversificar. Asimismo, Natixis Global AM cree que también los ETFs de renta fija pueden cosechar adeptos, especialmente en los tramos más cortos de la curva ante la escalada esperada (y reciente) de las rentabilidades. Sobre todo, destacan, pueden ser interesantes los productos con reajustes de tipos frecuentes. Mientras, ante las turbulencias que se esperan en los mercados ante la ‘cargada’ agenda política europea y la posibilidad de que Trump decepcione, entre otros retos, la firma considera que los ETFs ajustados a volatilidad llamarán la atención, pues ofrecen al inversor “exposición al activo que desea, pero tratando de modificar el nivel de riesgo que debe absorber durante la tenencia del mismo”. Finalmente, estos analistas apuntan a que las innovaciones en materia de ETFs activos no transparentes podrían continuar este año. “Muchos gestores se sienten incómodos al publicar diariamente sus posiciones (acciones, bonos, etc.), tal y como requiere el regulador para los ETFs activos. Temen que les copien u operen antes que ellos y para atajar el problema se están buscando maneras de restringir la información a periodos de tiempos más normales para estos productos, como cada 30 días o trimestralmente”, explican.