Page Personnel ha celebrado un año más el Foro Anual de Secretarias de Dirección en Barcelona. Con la colaboración de la coach y formadora Arrate Bahamonde, la compañía ha revelado durante el encuentro las claves para conseguir escuchar de manera eficaz. Conseguir escuchar eficazmente a los interlocutores que nos rodean no resulta sencillo y en […]
Dirigentes Digital
| 26 may 2015
Page Personnel ha celebrado un año más el Foro Anual de Secretarias de Dirección en Barcelona. Con la colaboración de la coach y formadora Arrate Bahamonde, la compañía ha revelado durante el encuentro las claves para conseguir escuchar de manera eficaz.
Conseguir escuchar eficazmente a los interlocutores que nos rodean no resulta sencillo y en el proceso influyen diferentes aspectos racionales y emocionales, como la falta de atención o interés por parte del receptor, la necesidad de confianza o la escasez del tiempo disponible. En función de la implicación del receptor, podemos distinguir hasta tres tipos de escuchas: activa, atenta y superficial.
Mientras que, en el caso de la ‘escucha activa’, el receptor "escucha" el lenguaje corporal, verbal y emocional del emisor para entender el mensaje en su conjunto, en la ‘escucha atenta’ la atención se centra en las palabras, no dándose una interacción real entre los sujetos. Sin embargo, debido a la velocidad de los sucesos y a las herramientas digitales predominantes en el entorno profesional actual, el 80% de las escuchas son superficiales. En este tipo de escucha el receptor focaliza la atención en sí mismo y en el mensaje, no en el emisor, ya que se corta el contacto visual.
Alcanzar un buen nivel de escucha nos permite ofrecer la intimidad y confianza necesarias para interactuar con otras personas. Por ello, la coach Arrate Bahamonde, ha compartido con las asistentes al Foro Anual de Secretarias de Dirección de Page Personnel las claves básicas para conseguir una escucha efectiva:
1. Establecer contacto visual con el emisor. Observando podemos captar detalles, como gestos o expresiones faciales, que nos permiten completar la información transmitida verbalmente. Además, mantener el contacto visual ayuda a evadirse de distracciones externas.
2. Mantener una postura corporal adecuada. Para fomentar la empatía con el interlocutor en una conversación, debemos mostrar una expresión facial relajada y una postura corporal abierta. Asimismo, es necesario mantener una distancia corporal adecuada, es decir, aquella con la que sintamos respetar el espacio del interlocutor.
3. Control de los tiempos de intervención. Resulta imprescindible saber mantener los silencios cuando se conversa con otra persona. Se deben evitar las interrupciones innecesarias, que pueden reflejar poco interés ante al tema tratado y complican la escucha activa. "Si escucháramos atentamente el silencio, nos daríamos cuenta de su valor durante la conversación mantenida", indica Bahamonde.
4. Reformulación de la información recibida. Comprobar que se está entendiendo la información a través de preguntas aclaratorias o reafirmaciones ayuda a hacer saber al emisor si comprendemos lo que comenta, así como contrastar la información recogida.