La ceremonia no se olvidó de la historia: mostró el arribo de los portugueses al nuevo mundo y su conquista de la población indígena, así como la esclavitud de los africanos durante 400 años para explicar la forma en que se construyó el complejo mosaico que es el Brasil actual, según informa Reuters. Brasil, hogar […]
Dirigentes Digital
| 06 ago 2016
La ceremonia no se olvidó de la historia: mostró el arribo de los portugueses al nuevo mundo y su conquista de la población indígena, así como la esclavitud de los africanos durante 400 años para explicar la forma en que se construyó el complejo mosaico que es el Brasil actual, según informa Reuters.
Brasil, hogar del Amazonas, usó la ceremonia para pedir a los 3.000 millones de personas que se estima verían el evento por televisión que cuiden el planeta.
A diferencia de las ceremonias de apertura de Pekín 2008 y Londres 2012, el espectáculo en Río careció de grandilocuencia, aunque sorprendió con algunos detalles inesperados en medio del homenaje a sus tradiciones culturales.
Pese a que la organización no dio a conocer el costo de la ceremonia, se estima que sería aproximadamente la mitad de los 42 millones de dólares que se invirtieron para el evento en Londres.
El tenista Gustavo Kuerten fue el encargado de entrar con la antorcha olímpica y la entregó a la jugadora de baloncesto Hortência Marcari, quien a su vez la pasó al encargado de encender el pebetero olímpico, el maratonista Vanderlei Cordeiro de Lima.
Situación política
El presidente interino Michel Temer presidió la ceremonia, rodeado de decenas de jefes de Estado, tras asumir el poder como consecuencia del proceso de juicio político contra la suspendida Dilma Rousseff-. Los 12.000 millones de dólares que han costado los Juegos han enfurecido a muchos de los 200 millones de brasileños, especialmente en Río, donde solamente un puñado se beneficiará de la cita deportiva o podrá acceder a ver alguna competencia. Algunos cientos de manifestantes tuvieron que ser dispersados por la policía cerca del estadio antes de la ceremonia.
Cerca de 11.000 atletas competirán en los Juegos Olímpicos 2016, a quienes se pidió que colocaran una semilla en un recipiente del estadio para ser plantados en la ciudad en unos años.