Por cierto, ¿les he dicho nuestras previsiones de evolución de empleo en Estados Unidos en enero? Esperamos 225.000 nuevos empleos y un descenso en la tasa de desempleo hasta un 4,9%. Con estos datos encima de la mesa, ¿de verdad deberíamos temer que la reciente moderación finalice en recesión? Pero, naturalmente, siempre nos podemos equivocar. […]
Dirigentes Digital
| 23 sep 2015
Por cierto, ¿les he dicho nuestras previsiones de evolución de empleo en Estados Unidos en enero? Esperamos 225.000 nuevos empleos y un descenso en la tasa de desempleo hasta un 4,9%.
Con estos datos encima de la mesa, ¿de verdad deberíamos temer que la reciente moderación finalice en recesión?
Pero, naturalmente, siempre nos podemos equivocar. Y es obvio que el escenario internacional y las condiciones financieras obligan a ser prudente al hablar de los riesgos para el crecimiento.
Aunque es difícil cuando consideramos la evolución del empleo y de la confianza de consumo hablar de un riesgo real de recesión.
Dicho todo lo anterior, el futuro, la valoración del pasado reciente plantea interrogantes que no se pueden obviar. Así, en el crecimiento anualizado del 0,7% influyeron todas las variables de demanda: moderación del consumo, caída de la inversión empresarial, descenso de inventarios y mayor déficit corriente.
¿Por qué? Siempre se puede hablar de factores temporales que, como en el caso de los inventarios, pueden revertirse a muy corto plazo. Pero, es cierto, como hizo la Fed tras su reunión de la semana pasada es importante seguir los datos. Y dentro de ellos el contexto internacional, aunque en mi opinión el deterioro de las condiciones financieras está lejos de convertirse en un lastre sostenido para el ritmo de crecimiento. Pero sí puede contribuir a su moderación a corto plazo. Por ejemplo, el fuerte peso de la caída de la inversión en energía sobre la inversión residencial.
Nosotros aún vemos un crecimiento del 2,0/2,5% para la economía norteamericana este año. Suficiente para que la Fed siga con su normalización monetaria. Pero, es obligado, una normalización donde debe primar la gradualidad.
José Luis Martínez Campuzano es estratega de Citi en España.