"La deuda asiática puede superar a la de los mercados desarrollados este año, gracias a una mejora en el crédito empresarial, el soporte de la liquidez global y la búsqueda de rentabilidad alternativa por parte de los inversores", aseguran. En su último informe de mercado, Joep Huntjens, de ING Investment Management, explica que a pesar […]
Dirigentes Digital
| 25 feb 2015
"La deuda asiática puede superar a la de los mercados desarrollados este año, gracias a una mejora en el crédito empresarial, el soporte de la liquidez global y la búsqueda de rentabilidad alternativa por parte de los inversores", aseguran.
En su último informe de mercado, Joep Huntjens, de ING Investment Management, explica que a pesar de que una subida de tipos en EEUU podría afectar negativamente a la evolución de la renta fija de los mercados emergentes asiáticos, el inversor debe tener en cuenta que la política monetaria de Janet Yellen cambiará de una forma muy lenta y gradual.
Del mismo modo, asegura que "el impacto de esta política se verá compensado por el spread que ofrece el high yield asiático, y la rentabilidad adicional de los bonos en moneda local de la región".
Desde ING IM anticipan que el crédito en Asia, incluida la deuda denominada en dólares, el high yield y los bonos en moneda local, tienen potencial para ofrecer una rentabilidad de hasta el 8,6% este año, aunque en el escenario base que manejan la cifra se sitúa entre el 2% y el 4%. En el caso del high yield, el rendimiento podría alcanzar el 11,4%, con el escenario base entre rentabilidades del 5,3% y el 7,3%.
Las previsiones para los países emergentes de la región son positivas para el analista, que asegura que "generarán el ritmo de crecimiento más rápido mientras que gigantes como China o India siguen en marcha con sus reformas económicas".
Además, explica que la caída de los precios del crudo y otras materias primas se traducirán en una mejora de sus balances externos, además de una menor inflación, "ofreciendo a los responsables de las políticas monetarias un mayor grado de libertad para promulgar políticas expansivas".
A pesar de las buenas previsiones, los expertos tienen claro que este tipo de activo también tiene sus riesgos. Y no son menores. Y el principal de todos ellos es la evolución de las divisas locales frente al dólar. Huntjens explica que "las agresivas políticas de los bancos centrales en Europa o Japón ayudan a la fortaleza del billete verde". Sin embargo, el experto deja claro que la rentabilidad es relativa, "y frente a otras monedas emergentes como las latinoamericanas, Asia debería presentar rendimientos positivos con una volatilidad inferior".