2.531. Es mi número de visitante. Y eso que aún el observatorio no se ha abierto al público. Según me cuentan, desde el pasado día 16 de mayo un selecto grupo de personas ha podido disfrutar de visitas privadas y exclusivas al nuevo y esperado observatorio. Un lugar que causa mucha curiosidad y expectación porque […]
Dirigentes Digital
| 26 may 2015
2.531. Es mi número de visitante. Y eso que aún el observatorio no se ha abierto al público. Según me cuentan, desde el pasado día 16 de mayo un selecto grupo de personas ha podido disfrutar de visitas privadas y exclusivas al nuevo y esperado observatorio.
Un lugar que causa mucha curiosidad y expectación porque la última vez que el rascacielos más alto del distrito financiero acogióturistas fue hace más de 13 años.
Otra fecha para apuntar en el calendario, y que serásigno de que la normalidad ha vuelto totalmente a la zona, es este 29 de mayo cuando el observatorio de la ‘Freedom Tower’abra por fin sus puertas a los visitantes.
Un trayecto a través de la historia
Entrar en el ‘One World Trade Center’, también conocido como ‘Freedom Tower‘, es ya de por síemocionante. Un momento que se ha hecho esperar demasiados años. Sus casi 542 metros de altura son imponentes, y la entrada, fastuosa.
Un enorme mapa del mundo nos recibe en el denominado "Global Welcome Center"hall. El número de turistas y sus procedencias serán solo algunas de las cifras que mostraráeste atlas a los nuevos visitantes.
Junto al mapa un pasillo y un lugar denominado "voices and foundations"donde una enorme pantalla dividida en decenas más pequeñas y cúbicas nos acerca las voces de aquéllos que trabajaron día y noche para construir este simbólico rascacielos.
Ingenieros, arquitectos, albañiles y otros trabajadores explican emocionados cómo ha sido la tarea de levantar desde la nada el nuevo proyecto que ahora se ha convertido en emblema de la recuperación de la ciudad.
Describen la dureza de los trabajos y los momentos más difíciles como cuando el huracán Sandy impactóde lleno en la construcción inundando los cimientos y provocando enormes daños.
Hay quienes recuerdan con una sonrisa cuando aún no había ventanas y las nubes cruzaban la altísima edificación. Otros derraman lágrimas y dicen sentirse muy orgullosos al saber que podrán contar a sus hijos que han formado parte de la historia de la ciudad al construir el grandioso ‘One World Trade Center’. Hay quienes incluso bromean con que ahora el "pequeño"’Empire State Building’dejaráde ser tan importante y pasaráa un segundo plano. Los propietarios del edificio, por su parte, cuentan orgullosos que se trata del mejor y más seguro rascacielos del mundo.
Siguiendo la visita, a través de otro pasillo, podemos tocar la "roca madre"de la ciudad de Nueva York. Una sólida roca que es cimiento de los enormes rascacielos que dibujan el horizonte de la Gran Manzana. Tocarla es sentir la fuerza de esta ciudad que ha sabido recuperarse a pesar de las adversidades.
Al final del pasillo 5 ascensores, hoy vacíos pero seguro que en unos días a rebosar de curiosos y turistas. Los "sky pod elevators" son una atracción en símisma. 5 enormes pantallas (una de ellas en el techo) con la última tecnología Led se iluminan a nuestro alrededor. En menos de 60 segundos experimentamos un lapso de tiempo virtual que recrea el desarrollo del horizonte del downtown de Nueva York desde los cimientos en el año 1.500 hasta lo más alto en actualidad. Un sensacional "viaje a vista de pájaro"hasta la planta 102 del edificio.
El observatorio
Lo primero que encontramos en la planta 102 es el "See Forever Theater"donde se proyecta un magnífico video de dos minutos que combina imágenes desde las alturas con otras a pie de calle donde vemos el día a día de vida de los neoyorquinos y sus barrios más emblemáticos. El colofón de la presentación nos deja literalmente con la boca abierta. Como si de un telón de teatro se tratara, la pantalla se alza ante nosotros, se hace la luz y a nuestros pies la ciudad más impresionante del mundo.
Con una envidiable panorámica de 360 grados podemos ver la ciudad prácticamente en su totalidad. La Estatua de la Libertad, la Isla de Ellis, los puentes más famosos sobre el East River (el de Brooklyn, Manhattan, Williamsburg o Qeensboro), también el puente de Verrazano, las islas de Roosvelt y Governors, Brooklyn, Queens o el estado de New Jersey.
A nuestros pies el "Memorial", monumento con las dos enormes fuentes situadas justo donde estaban las torres gemelas y que recuerda a los fallecidos del 11 de septiembre.
Manhattan prácticamente en su totalidad: downtown, midtonwn y uptonwn, con una magnifica vista del ‘Empire State Building’, el ‘Chrysler’y al fondo Central Park. También logramos ver, más allá, el Bronx donde se encuentra el Yankee Stadium. Sin duda la mejor panorámica de Nueva York.
Tan impactante que incluso podemos ver perfectamente la cercanía de los aviones sobrevolando la zona hacia los distintos aeropuertos de la ciudad. Algo que, sin embargo, trae tristes imágenes del pasado a nuestra mente.
Otras atracciones
La entrada al observatorio costará32 dólares a los adultos y 26 a los niños. Los mayores de 65 años pagarán 30 dólares. El precio incluiráademás otras dos plantas (la 101 y la 100) completamente acristaladas y con diferentes actividades. Desde el "sky portal"que ofrece a nuestros pies una imagen en video en tiempo real de las calles bajo el edificio, una tienda de souvenirs, o el "city pulse"un "conserje interactivo"que conecta al visitante con los puntos de referencia y barrios de la ciudad.
Además hay tres restaurantes que ofrecen desde desayunos hasta cenas, siempre con las mejores vistas de Nueva York. También podremos inmortalizar el momento, con coste adicional, con una foto con el panorama de la ciudad. Y para aquéllos que quieran conocer más acerca de lo que ven a su alrededor, por 15 dólares extra, podrán usar durante una hora el "One World Explorer", una tableta interactiva que nos explica en varios idiomas todo lo que nosotros mismos enfoquemos con ella del exterior de la ciudad.
Las tres plantas que conforman el observatorio del ‘One World Trade Center’permanecerán abiertas de 9 de la mañana a medianoche (las 23:15 serála última hora de entrada permitida) en verano y en invierno de 9 a 20 horas. Sin duda este lugar estállamado a convertirse en la atracción número uno de la ciudad de los rascacielos.acielos.