Según el último Henderson Global Dividend Index, la remuneración al accionista global aumentó un 2,3% en el segundo trimestre, hasta alcanzar los 421.600 millones. Estados Unidos registró su cota más baja desde 2013 (ante el bajo crecimiento de los beneficios y la apreciación del dólar), mientras que Europa recuperó terreno con el reparto de 140.200 […]
Dirigentes Digital
| 23 sep 2016
Según el último Henderson Global Dividend Index, la remuneración al accionista global aumentó un 2,3% en el segundo trimestre, hasta alcanzar los 421.600 millones. Estados Unidos registró su cota más baja desde 2013 (ante el bajo crecimiento de los beneficios y la apreciación del dólar), mientras que Europa recuperó terreno con el reparto de 140.200 millones.
Aunque el liderazgo sigue al otro lado del Atlántico, Holanda y Francia consiguieron el segundo y tercer puesto en cuanto a incrementos. Si bien, Alemania y España se quedaron rezagadas por los importantes recortes perpetrados por Deutsche Bank, Volkswagen y Banco Santander.
El consejo de la firma en este contexto es aplicar un enfoque global a la búsqueda de rentas periódicas para ayudar a los inversores a reducir su dependencia de una sola región del mundo, "lo que brinda un crecimiento de los dividendos más estable a largo plazo del que un único país podría ofrecer en condiciones normales".
Mientras, Scander Bentchikou, gestor del fondo Objectif Dividendes Min Var de Lazard Frères Gestion, cree que la clave pasa por tratar de encontrar el ratio riesgo/beneficio adecuado con "dividendos permanentes y crecientes". Con un enfoque, "orientado hacia un objetivo de volatilidad inferior al 30% del índice que tengamos como referencia".
Recuerda que desde que comenzara 2016, estar infraponderado en banca, "sector muy volátil que ha registrado una rentabilidad inferior, ha sido un beneficio". Al tiempo que "los valores inmobiliarios han jugado un papel atractivo, ya que han disfrutado de la ventaja de los bajos tipos de interés, lo que permite la refinanciación a un coste extremadamente bajo".
Con nombre propio afirma que "Enagás ha sido una de las contribuciones más positivas al rendimiento de la cartera", pues se ha beneficiado de una mejora de sus condiciones de financiación. Por su parte, LEG Immobilien, es otra compañía interesante (reversión positiva de los alquileres y financiación a tipos muy bajos). También destaca la aportación de Sodexo (ha reiterado objetivos de crecimiento a medio plazo) y Bpost.
Por el contrario, "no contar con acciones como Deutsche Bank o italianas como Unicredit o Intesa San Paolo también supone un beneficio añadido", ante el flujo de noticias negativas sobre el sector financiero italiano y las ampliaciones de capital a las que parecen abocadas las dos primeras.
Desde Lazard Frères subrayan asimismo el potencial de Catalana Occidente (muy bien gestionada en sus funciones tradicionales y mantiene también una cultura muy orientada hacia la rentabilidad), rehacen posición en Astrazeneca (de aquí a 2018, esa empresa reemprenderá la senda del crecimiento) y apuestan por Luxottica (el crecimiento orgánico en el sector de gafas es superior a la media de otros bienes de consumo desde hace muchos años).
Finalmente, desde Degroof Petercam AM señalan que en la inversión en dividendos "todo gira en torno a la anticipación". Adelantarse a la caída o recorte de los dividendos y, viceversa, al aumento de los mismos mediante la vigilancia de las rentabilidades futuras. Concretamente, para ese ejercicio señalan como temas interesantes la combinación tanto de la rentabilidad por dividendo como del crecimiento del dividendo, empresas con fuertes balances ("para capear el temporal") y cash flow capaz de soportar el dividendo, y Japón y Europa frente a Estados Unidos, pues, al otro lado del Atlántico, están muy centrados en las recompras de acciones.