Donald John Trump, cuarto de cinco hermanos, nacido de padres inmigrantes, forjó desde los años 80 un imperio empresarial orientado a la construcción de hoteles, casinos y viviendas de lujo siguiendo el negocio inmobiliario de su padre, Fred, que formó su fortuna construyendo miles de viviendas de clase media en los barrios neoyorquinos de Queens, […]
Dirigentes Digital
| 07 sep 2016
Donald John Trump, cuarto de cinco hermanos, nacido de padres inmigrantes, forjó desde los años 80 un imperio empresarial orientado a la construcción de hoteles, casinos y viviendas de lujo siguiendo el negocio inmobiliario de su padre, Fred, que formó su fortuna construyendo miles de viviendas de clase media en los barrios neoyorquinos de Queens, Brooklyn y Staten Island. Casado en tres ocasiones, Trump se hizo más popular entre los estadounidenses desde el año 2005, cuando comenzó a protagonizar el reality show "El aprendiz", en el que un grupo de aspirantes competían por un contrato para dirigir alguna de las empresas del magnate. 11 años de exposición pública televisada que le han hecho ganarse las simpatías de muchos. Fue en esta época cuando se empezó a interesar por la política, mostrando ideas calificadas por muchos como muy conservadoras, machistas y xenófobas. En 2015, Donald Trump presentaba su candidatura a la presidencia de los Estados Unidos por el Partido Republicano. Desde el principio en el ojo del huracán, nadie se lo tomó en serio, pero pese a sus constantes declaraciones fuera de lugar y subidas de tono, ha desbancado sin problemas a sus competidores haciéndose con la candidatura republicana a la Casa Blanca.
Make America great again
"Hacer grande América de nuevo" es el lema de su campaña electoral. Una expresión que se ha hecho muy popular entre los seguidores del multimillonario, pero que no es novedosa: ya la usó Ronald Reagan en su campaña presidencial de 1980. Muchos estadounidenses se preguntan qué es lo que hará Donald Trump para hacer que Estados Unidos "sea grande de nuevo". Para empezar, él mismo dice que será el presidente del empleo: "Voy a ser el mejor presidente del empleo que Dios haya creado". Menos claro es su programa económico, un asunto que es la mayor preocupación para el 44% de los estadounidenses. Entre sus propuestas destacan:
1. mantener el salario mínimo
Este es uno de los temas más sensibles porque, aunque el desempleo ha bajado en los últimos años, los salarios se han mantenido estables. Donald Trump no cree que los 7,25 dólares mínimos por hora deban aumentar, aunque en 2013 comentó que quizás debería haber dos salarios mínimos diferentes: uno para las familias y otro para los adolescentes. Trump sugiere que un aumento del salario mínimo federal haría de Estados Unidos un país menos competitivo frente a otros países con menores costes laborales. Añade que "los salarios más altos obligarían a las empresas estadounidenses a subcontratar empleados cada vez más en países de ultramar con menores costes laborales, y esto subiría los precios de los bienes y servicios nacionales".
La Oficina de Presupuestos del Congreso estadounidense, que tiene carácter independiente, ha publicado que aumentar el salario mínimo a 10,10 dólares por hora costaría seguramente medio millón de puestos de trabajo y probablemente elevaría la pobreza a casi un millón de personas.
2. Aranceles
Según declaraciones de Trump, uno de sus objetivos es "traer de China, México o Japón, entre otros tantos lugares, los empleos a Estados Unidos". Es decir, que las empresas americanas vuelvan a fabricar en Estados Unidos. Para ello impondrá aranceles sobre las mercancías extranjeras y negociará mejores acuerdos comerciales. En uno de sus primeros discursos como pre candidato republicano amenazó con aplicar un impuesto del 35% a los coches Ford fabricados en México y que son vendidos en Estados Unidos. Antes, ya había mencionado que podría poner un arancel del 25% sobre las mercancías procedentes de China. Algunos expertos advierten de que esta propuesta perjudicaría a los empleos y exportaciones de Estados Unidos.
3. Trato comercial TPP
Trump ya ha mostrado su desacuerdo con el tratado Transpacífico de Barack Obama, por el que once países más Estados Unidos han acordado nuevos lazos comerciales. Ha asegurado que, de llegar a la presidencia, sacará al país del mismo. "El TPP sería un golpe mortal para la industria manufacturera de Estados Unidos", dijo recientemente en un mitin ante sus seguidores. Además, Donald Trump dice que buscará renegociar o sacar a Estados Unidos del Tratado de Libre Comercio de América del Norte al que están suscritos junto con Canadá y México.
Puede leer el reportaje completo en la revista DIRIGENTES del mes de septiembre.