El complejo hidroeléctrico Terni, con capacidad de generación de 527 megawatios (MW) y una producción de 1,4 terawatios/hora al año, se puso en venta a finales de 2013 junto con otros activos de la eléctrica germana en Italia. ERG opera actualmente parques eólicos en Europa con una potencia total de 1,38 gigawatios (GW), de los […]
Dirigentes Digital
| 07 ago 2015
El complejo hidroeléctrico Terni, con capacidad de generación de 527 megawatios (MW) y una producción de 1,4 terawatios/hora al año, se puso en venta a finales de 2013 junto con otros activos de la eléctrica germana en Italia.
ERG opera actualmente parques eólicos en Europa con una potencia total de 1,38 gigawatios (GW), de los 1,1 GW están en Italia, así como una central térmica de gas en Sicilia con potencia de 480 MW.
Con esta adquisición, cuyo precio coincide con lo que fuentes familiarizadas con el asunto dijeron a principios de año, la antigua petrolera continúa su transformación hacia una empresa especializada en energía renovable.
"La adquisición permitirá una mejora significativa en los resultados económicos y la generación de caja a medio plazo", dijo el consejero delegado de ERG, Luca Bettonte, en un comunicado.
La compra contempla 16 plantas hidroeléctricas, una estación de bombeo, siete presas grandes y tres embalses, 22 presas más pequeñas y 155 kilómetros de canales y túneles. Se financiará en efectivo y con un préstamo sindicado de 700 millones de euros.
Para E.ON, la desinversión sucede a la venta de activos de generación en Italia y de sus negocios en España, poniendo fin a su malograda incursión en el sur de Europa, donde hizo un fuerte desembolso en compras en la última década.
E.ON se gastó 11.500 millones de euros en comprar principalmente generación térmica en España, Italia y Francia en 2007 con la expectativa de que la demanda de energía creciese con fuerza en esos países.
Sin embargo, las expectativas no se materializaron por la crisis de la deuda soberana, lo que obligó a E.ON a ajustar el valor de casi la mitad de los activos.
E.ON, que actualmente se encuentra en proceso de segregar sus plantas eléctricas en una filial separada, dijo que mantendrá y desarrollará su negocio de venta de electricidad y gas en Italia, que abastece a cerca de 700.000 clientes en el país.