El PIB alemán creció un 0,6% en el segundo trimestres, en línea con las primeras estimaciones, según los datos publicados por la agencia nacional Destatis. El avance de la economía germana vino motivado por el buen comportamiento de la demanda interna; el consumo privado creció un 0,8%, su mejor dato en los últimos seis años. […]
Dirigentes Digital
| 25 ago 2017
El PIB alemán creció un 0,6% en el segundo trimestres, en línea con las primeras estimaciones, según los datos publicados por la agencia nacional Destatis. El avance de la economía germana vino motivado por el buen comportamiento de la demanda interna; el consumo privado creció un 0,8%, su mejor dato en los últimos seis años. En sentido contrario, la demanda externa de Alemania se estancó durante el periodo, con un incremento de las exportaciones de tan sólo el 0,7%, frente a un 1,7% en las importaciones. Sin embargo, el superávit por cuenta corriente del país sigue siendo el mayor del mundo, con un saldo positivo de más de 245.000 millones de euros, según los datos del Fondo Monetario Internacional (FMI). Este desequilibrio ha sido criticado por diversos organismos internacionales, ya que sus altas tasas de ahorro y el excesivo enfoque exportador podrían suponer un riesgo para la estabilidad global. El país germano mantiene un ritmo de crecimiento en paralelo al resto de la Eurozona, que también avanzó un 0,6% en el segundo trimestre del ejercicio, alcanzando máximos de los últimos cinco años. En la misma línea, el desempleo se situó en junio en el 9,1%, su mínimo de los últimos nueve años. Sin embargo, algunas economías están destacando por su aportación positiva a la expasión conjunta. Este es el caso de España, cuyo crecimiento en el segundo trimestre se situó en el 0,9%, según los datos publicados esta semana por el Banco de España.