La jornada comenzaba algo más calmada tras un cierre de pérdidas moderadas en Asia y unos datos macro más tranquilizadores. Aunque la producción industrial alemana bajó un 0,5% en febrero, la cifra es mucho mejor de la profunda caída del 1,8% que esperaban los analistas. "Hoy cabría esperar un descanso de los números rojos pero […]
Dirigentes Digital
| 06 abr 2016
La jornada comenzaba algo más calmada tras un cierre de pérdidas moderadas en Asia y unos datos macro más tranquilizadores. Aunque la producción industrial alemana bajó un 0,5% en febrero, la cifra es mucho mejor de la profunda caída del 1,8% que esperaban los analistas. "Hoy cabría esperar un descanso de los números rojos pero tampoco hay ningún catalizador que justifique una mejora", auguraban desde el departamento de análisis de Bankinter.
Y estaban en lo cierto. Los inversores aún mantienen la prudencia tras el daño sufrido ayer por la Bolsa española. "Realmente no hay un detonante claro. De hecho, muchos analistas buscan excusas en Asia cuando en el fondo los argumentos están en los países desarrollados", explica José Luis Rodríguez Campuzano, estratega de Citi en España, señalando que los últimos datos económicos en EEUU, como los de la balanza comercial de febrero conocida ayer, "restan margen de crecimiento interno. Ya algunos analistas estiman el crecimiento en el primer trimestre en niveles incluso bien por debajo del 1 % anualizado".
"En Europa el mensaje claramente dovish de Praet ahora tampoco es muy tranquilizador. Europa tiene problemas, políticos y a nivel económico. Una combinación de ambos es lo que vemos en estos momentos en Grecia", advierte.
Los analsitas de Link Securities, indican del mismo modo que los inversores han estado huyendo en estas sesiones de los activos de mayor riesgo y apostando por otros de corte más defensivo como los bonos soberanos alemanes, los del Tesoro estadounidense, el yen japonés y el oro. "Esta nueva fase de aversión al riego que perece estar iniciándose se ha venido "cocinando" desde hace días, tras el fuerte retroceso que desde sus niveles máximos del año ha tenido el precio del crudo (aproximadamente ha cedido en las últimas semanas un 12%)".
Las declaraciones de la directora gerente del FMI, la francesa Lagarde, confirmando esta percepción de debilidad económica global también pesaron en el ánimo de unos inversores que vuelven a mostrar dudas sobre el escenario al que se enfrentan los mercados en el corto/medio plazo. Ni siquiera la publicación en EEUU de unas positivas cifras de actividad en el sector servicios y en lo que hace referencia al empleo sirvió en esta ocasión para tranquilizar los ánimos de los inversores.
A los temores al crecimiento se suma también la caída de los precios del petróleo, con el barril de Brent recuperándose hoy a los 38,5 dólares.
"Venimos insistiendo en la correlación existente en los últimos meses entre las bolsas y el oro negro, y en este inicio del segundo trimestre del año la tónica sigue siendo la misma", explican los expertos de IG.
Tal y como recuerdan, a mediados de abril se celebrará una reunión entre productores de la OPEP y algunos productores ‘no OPEP’, en la que en principio estaba previsto que se hablase sobre un posible acuerdo para una congelación de la producción. Sin embargo, "desde la semana pasada, Arabia Saudí e Irán han ido lanzando declaraciones cruzadas que hacen indicar que ese acuerdo va a ser muy complicado", indican los expertos. "Evidentemente, si continúan estos desencuentros antes de la reunión, el precio del crudo podría continuar bajando, lo que afectaría negativamente a las bolsas, dada la elevada correlación que comentamos".
En este sentido, los inversores estarán muy atentos a la publicación de los inventarios de crudo semanales en EEUU, así como a las actas de la última reunión del FOMC.