Las ganancias por acción han caído de manera brusca durante tres trimestres consecutivos y, a pesar de que los analistas habían bajado sus expectativas para las ganancias del cuarto trimestre debido al desplome de los precios del petróleo, un dólar fuerte y los temores acerca de desaceleración de la economía china, los resultados negativos superaron […]
Dirigentes Digital
| 25 feb 2016
Las ganancias por acción han caído de manera brusca durante tres trimestres consecutivos y, a pesar de que los analistas habían bajado sus expectativas para las ganancias del cuarto trimestre debido al desplome de los precios del petróleo, un dólar fuerte y los temores acerca de desaceleración de la economía china, los resultados negativos superaron las expectativas.
Al analista estadounidense Phil Davis, CEO de philstockworld.com, no le sorprende el resultado de este informe teniendo en cuenta que "el sector de la energía está arrastrando a la baja de manera significativa las ganancias del S&P 500". "Sin contar el sector de la energía, los beneficios de este selectivo serían de hasta el 1,7%". En conjunto, el S&P 500 ha registrado unos beneficios negativos de un -4%.
Solo el 30% de las empresas de energía superaron las expectativas. Phil Davis tiene claro que el motivo de la brusca caída de las acciones la tienen los bajos precios del petróleo y los bajos tipos de interés que han exprimido a los sectores energético y financiero.
En su informe, Bank of America Merril Lynch explica que las ganancias del sector energético se han hundido casi en un 80% en términos interanuales, asegurando que de las 381 compañías cotizadas en el índice S&P500 que han presentado sus resultados del cuarto trimestre, las más expuestas al sector de las materias primas han tenido unos resultados "decepcionantes" como consecuencia de la caída del precio del petróleo.
"El daño real se debe a que las compañías de energía solar y eólica son generalmente consideradas como 'tecnólogicas' y no de 'energía', lo que provoca un golpe más duro al sector", explica Davis.
Aún así, el fundador de philstockworld.com cree que es normal que haya ocurrido esto porque "no todos los sectores pueden o deben tener ganancias todo el tiempo. La rotación de sectores es normal en las economías saneadas y de alguna manera nos hemos metido en este atolladero donde creemos que cada vez que un sector está teniendo problemas tenemos que solucionarlo".
A su juicio, "la energía es un buen ejemplo de cómo la era de los combustibles fósiles llega a su fin y se vuelve cada vez menos valiosa, y desaparecerán (quizás en los próximos 40 años) como otras muchas compañías de la vieja guardia mientras que las nuevas empresas se harán con los mandos".
Phil Davis también achaca los bajos beneficios por acción a los pobres tipos de cambio del dólar. "Los grandes exportadores estadounidenses están viendo como sus ganancias merman con el cambio a euros, yenes o yuanes". "El 50% de las ganancias de S&P500 vienen del extranjero", explica Davis.
¿Cómo le irá a la economía estadounidense?
Los analistas de BofAMerril Lynch se han mostrado pesimistas ya que más del 80% de las empresas del sector energético han emitido unas expectativas negativas para los ingresos futuros. Estiman que el crecimiento del beneficio por acción en este primer trimestre de 2016 será incluso más débil que en el último trimestre de 2015.
"Estamos pasando por una fase de ajuste del sector de la energía que se llegará a convertir en una parte más pequeña de la economía. Por supuesto que puede causar algo de 'dolor' en los bancos que les prestaron dinero, pero, en general, se trata de una rotación muy saludable", explican los expertos
En la última encuesta entre gestores de fondos de BofA Merrill Lynch, los consultados situaban tanto las expectativas de crecimiento como las de beneficio en negativo por primera vez desde julio de 2012. Para el señor Davis la solución es simple: "no comprar o invertir en reservas de petróleo".
Además, según la entidad estadounidense, una posible recesión en EEUU se ha convertido en el mayor riesgo para los inversores a nivel global. El 90% de los gestores de fondos de este banco no cree que la Reserva Federal lleve a cabo más de dos subidas de tipos de interés durante este año. Para el CEO de philstockworld.com "dos alzas sería lo normal y la economía estadounidense no se vería afectada; precisamente eso es lo que le gusta a la Fed", sentencia Davis.