Tras pedir por el final de las guerras civiles en Siria y Libia, el Sumo Pontífice pidió "que toda la Comunidad internacional ponga su atención de manera unánime en que cesen las atrocidades que, tanto en estos países como también en Irak, Yemen y en el África subsahariana, causan todavía numerosas víctimas, provocan enormes sufrimientos […]
Dirigentes Digital
| 26 dic 2015
Tras pedir por el final de las guerras civiles en Siria y Libia, el Sumo Pontífice pidió "que toda la Comunidad internacional ponga su atención de manera unánime en que cesen las atrocidades que, tanto en estos países como también en Irak, Yemen y en el África subsahariana, causan todavía numerosas víctimas, provocan enormes sufrimientos y no respetan ni siquiera el patrimonio histórico y cultural de pueblos enteros".
Según informó Reuters, el Papa condenó además los "atroces actos terroristas", como los ataques en París en los que murieron 130 personas y el derribo de un avión ruso sobre el Sinaí egipcio, en el que murieron más de 200 persona. Ambos fueron reivindicados por el Estado Islámico.
El pontífice pidió por la paz entre israelíes y palestinos en la región en la que nació Jesús. "Donde nace Dios, nace la esperanza. Donde nace Dios, nace la paz. Y donde nace la paz, no hay lugar para el odio ni para la guerra", declaró Francisco. "Sin embargo, precisamente allí donde el Hijo de Dios vino al mundo, continúan las tensiones y las violencias y la paz queda como un don que se debe pedir y construir".
El Papa recordó además a los cristianos que sufren persecuciones en todo el mundo y rogó a Dios que les diera consolación y fortaleza, orando por la paz en la República Democrática del Congo, Burundi, Sudán del Sur y Ucrania. Francisco acusó también que la dignidad humana de demasiadas personas está siendo pisoteada, incluyendo la de refugiados y migrantes. "Todavía hoy muchos hombres y mujeres son privados de su dignidad humana y, como el Niño Jesús, sufren el frío, la pobreza y el rechazo de los hombres", dijo Francisco. "Que hoy llegue nuestra cercanía a los más indefensos, sobre todo a los niños soldado, a las mujeres que padecen violencia, a las víctimas de la trata de personas y del narcotráfico".