El beneficio de Lufthansa se ha desplomado un 55%, hasta los 429 millones de euros. La aerolínea facturó entre enero y junio 15.042 millones de euros, lo que supone un 2,1% menos que en el mismo periodo de 2015. Los ingresos por el tráfico de pasajeros cayeron un 4,5% hasta los 11.637 millones de euros. […]
Dirigentes Digital
| 02 ago 2016
El beneficio de Lufthansa se ha desplomado un 55%, hasta los 429 millones de euros. La aerolínea facturó entre enero y junio 15.042 millones de euros, lo que supone un 2,1% menos que en el mismo periodo de 2015. Los ingresos por el tráfico de pasajeros cayeron un 4,5% hasta los 11.637 millones de euros.
El Ebitda, en cambio, ascendió un 11,9% hasta los 418 millones. La compañía ha conseguido reducir sus costes en un 4,8% gracias a la importante caída de los costes asociados al combustible, que le han supuesto un ahorro de 597 millones de euros gracias a los bajos precios del crudo.
Sin embargo, el grupo ha reconocido que ahora deberá centrarse en reducir costes después de que los últimos atentados en Europa le hayan supuesto varias cancelaciones y que los viajeros se muestren más reacios a viajar hacia el Viejo Continente, lo que les ha hecho revisar sus previsiones para este año.
La aerolínea ya recortó hace dos semanas su pronóstico de beneficios para este año y recortó sus planes de crecimiento después de la caída sufrida en las reservas de vuelo de larga distancia, no solo por los atentados en Europa, sino también por la incertidumbre desatada tras la victoria el Brexit y el fallido golpe de Estado de Turquía.
Otras grandes aerolíneas europeas han sufrido el impacto de los últimos atentados en la región y del voto del Brexit, para lo que han tenido que hacer recortes en sus previsiones de crecimiento, principalmente por la presión sobre los precios.
Es el caso de Air France-KLM, que ya aseguró estar preocupada por cómo la amenaza terrorista podría reducir el atractivo turístico de Francia. Desde British Airways (IAG) también han querido ser cautelosos con las previsiones para este año y afirmó que la demanda de viajes corporativos se mantiene suave tras el referéndum británico.
En este contexto, Lufthansa ha reducido sus previsiones para el Ebit por debajo de los resultados del año pasado, cuando alcanzó poco más de los 1.800 millones de euros.