Las perspectivas de adhesión de Turquía a la Unión Europea parecen más remotas que nunca después de 11 años de negociaciones. Los líderes europeos han criticado el historial turco en materia de libertades, mientras que Ankara se ha mostrado cada vez más irritada por lo que considera paternalismo occidental, informa Reuters. “Turquía debe sentirse cómoda, no debe decir ‘tiene que ser la Unión Europea a cualquier coste’. Ese es mi punto de vista,” dijo Erdogan según comentarios recogidos en el periódico Hurriyet realizados a los periodistas en su avión en el camino de regreso de una visita a Pakistán y Uzbekistán. “¿Qué razón hay para que Turquía no esté en los Cinco de Shanghái? Le dije esto a Putin (presidente de Rusia), a Nazarbayev (presidente kazajo), a los que están en los Cinco de Shanghái”, dijo. “Espero que si hay un desarrollo positivo ahí, creo que si Turquía se une a los Cinco de Shanghái, podrá actuar con mucha mayor comodidad”. China, Rusia y cuatro naciones de Asia Central – Kazajstán, Kirguistán, Tayikistán y Uzbekistán – formaron la Organización de Cooperación de Shanghái (OCS) en 2001 como un bloque de seguridad regional para combatir las amenazas planteadas por el islam radical y el narcotráfico del vecino Afganistán. La pertenencia turca a la OCS, que inicialmente no incluía a Uzbekistán y era conocida como los Cinco de Shanghái, podría alarmar a los aliados occidentales y miembros de la OTAN. Kazajstán, Kirguistán y Uzbekistán hablan lenguas túrquicas, y Ankara se convirtió en 2013 en “socio de diálogo” diciendo que comparte “el mismo destino” que los miembros del bloque. Mongolia, India, Irán, Pakistán y Afganistán son observadores de la OCS, mientras que Bielorrusia, al igual que Turquía, es un interlocutor. Los socios de diálogo tienen derecho a participar en reuniones de nivel ministerial y otras reuniones de la OCS, pero no tienen derecho a voto. Erdogan pidió ayer a los turcos que sean pacientes hasta finales de año respecto a las relaciones con Europa y dijo que podría celebrarse un referéndum sobre la adhesión a la UE en 2017.