Es una de las principales lacras del sector. Una falta de transparencia obligada para evitar desvelar las estrategias de los distintos gestores. Pero la realidad es que, en muchos casos, los inversores de los fondos gestionados activamente no disponen de información sobre lo que los gestores están haciendo con su dinero. Esto puede hacer que […]
Dirigentes Digital
| 04 feb 2016
Es una de las principales lacras del sector. Una falta de transparencia obligada para evitar desvelar las estrategias de los distintos gestores. Pero la realidad es que, en muchos casos, los inversores de los fondos gestionados activamente no disponen de información sobre lo que los gestores están haciendo con su dinero. Esto puede hacer que sean incapaces de evaluar si las comisiones que pagan están justificadas o no.
En este escenario, el regulador de los mercados europeos lleva meses investigando estas prácticas. Y ahora, pasa el legado a los reguladores nacionales, ante la evidencia de que el principal perjudicado vuelve a ser, de nuevo, el inversor. Para su análisis, ESMA se centró en el estudio de fondos UCITS de renta variable domiciliados en estados miembros de la unión europea, con activos bajo gestión superiores a los 50 millones de euros, lanzados antes del 1 de enero de 2015 y con comisiones de gestión superiores al 0,65%, más típicas de los fondos de gestión activa.
Para analizar la práctica de los gestores, ESMA a empleado algunos de los ratios que los inversores también deben tener muy en cuenta a la hora de analizar si el producto elegido para depositar su dinero es gestionado de una forma activa o pasiva. Entre ellos, el active share, el R2 (coeficiente de determinación) o el tracking error.
Aunque hay diversas fórmulas, por lo general, aquellos fondos con un active share inferior al 60% y un tracking error menor del 4% podrían ser clasificados como potenciales ‘closet indexers’.
"La protección del inversor es el núcleo de nuestra misión y los resultados preliminares plantean cuestiones que merecen un análisis más detallado. Los gestores de fondos deben proporcionar a los inversores información que sea imparcial, clara y veraz. Por eso, en asociación con los reguladores nacionales, estamos vigilando de cerca este problema", indica Steven Maijoor, presidente de ESMA.
Y la CNMV tendrá un papel protagonista en el proceso, en el que no se descartan sanciones. Según el estudio Indexing and Active Fund Management:International Evidence elaborado por diversos expertos de instituciones y universidades europeas y estadounidenses, el 42% de los fondos domiciliados en Españabajo la categoría de renta variable entrarían dentro de este segmento de productos clasificados como activos pero que, en realidad, llevan a cabo un estilo de inversión pasiva.