El atentado terrorista contra la revista Charlie Hebdo ha recordado que la amenaza del yihadismo es cercana y real. Tanto Melilla como las ciudades marroquíes fronterizas con España se han convertido en una zona estratégica para la captación de nuevos yihadistas. En los últimos años, se han detenido a más de 60 personas por esta cuestión.
Marruecos calcula que más de 1.500 ciudadanos se han enrolado para combatir en Irak y Siria. En pocos meses, la Policía y Guardia Civil ha desarticulado a tres células en la zona que preparaban nuevos reclutas. La última hace dos meses.
La falsa alarma de bomba en Atocha de la pasada semana volvió a encender la memoria del mayor atentado terrorista que ha sufrido España, el del 11 de marzo de 2004, y donde fallecieron 192 personas. Actualmente, el Ministerio de Interior tiene activado el nivel 2 de alerta por terrorismo, el máximo es 4 cuando el riesgo es extremo. En las próximas horas, se podría elevar el nivel tras los asesinatos de la publicación francesa en París.