La dura caída de la cotización de Facebook ha hecho perder a la firma tecnológica 50.000 millones de dólares de su valor bursátil. Una situación que ha arrastrado al resto del sector tecnológico y ha hecho plantear a los analistas si algo ha cambiado en su modelo de negocio. No es la primera vez que […]
Dirigentes Digital
| 21 mar 2018
La dura caída de la cotización de Facebook ha hecho perder a la firma tecnológica 50.000 millones de dólares de su valor bursátil. Una situación que ha arrastrado al resto del sector tecnológico y ha hecho plantear a los analistas si algo ha cambiado en su modelo de negocio. No es la primera vez que noticias alrededor de la firma fundada por Mark Zuckerberg ponen en tela de juicio el valor de la compañía, y siempre relacionado por hechos políticos. “Ya en enero, las acciones de la compañía experimentaron un retroceso similar tras la revelación de que sus algoritmos habían desempeñado un papel en la difusión de noticias falsas sobre la campaña presidencial de Estados Unidos. Esta vez se está produciendo un escándalo en la violación de datos de los usuarios. Cambridge Analytica”, recuerda Shoaib Zafar, analista del equipo de renta variable global de SYZ Asset Management. A su juicio, los principales recelos de los inversores incluyen la incapacidad de comprender “completamente la magnitud del problema, los temores de que se intensifique el riesgo regulatorio, el sabotaje potencial de las campañas publicitarias que usan datos mejorados de los usuarios y las posibles responsabilidades financieras de este episodio”. Y todo pese a que Zuckerberg ya anunció a principios de año que está dispuesto a colaborar para corregir las imperfecciones del sistema que creó. “Nos preguntamos cuánto control tiene realmente Facebook sobre los datos de sus 2.000 millones de usuarios. ¿Los Estados y agencias como la CIA respetan las políticas de privacidad cuando se trata de extraer información sobre los usuarios bajo el pretexto de la seguridad nacional? ¿Y qué hay de los incidentes de piratería incluso en sus sistemas? Esto nos lleva a que nos surja una pregunta natural: ¿puede realmente Facebook tapar todo, o al menos la mayoría de los agujeros o resquicios legales en la seguridad de datos? Lamentablemente, la pregunta sigue sin respuesta…”, advierte Zafar. Pero no todo son puntos negativos sobre el gigante tecnológico. Según el analista del equipo de renta variable global de SYZ Asset Management, la firma de Zuckerber cuenta con reservas de liquidez, por lo que podría llevar a cabo “inversiones significativas en sus áreas débiles, e incluso pagar grandes penalizaciones si fuera necesario, sin dañar sus ingresos operativos o netos”. “La generación de flujo libre de caja más baja en 2018 respecto a 2017 ya está descontada”, subraya el analista de SYZ AM. “Un negocio que genera un 86% de margen bruto, un 57% de margen de Ebitda, es muy probable que haya mejorado la generación de flujo de caja en años posteriores a grandes inversiones. Lo que es más importante: es probable que el valor de marca de Facebook siga intacto. La compañía seguirá creciendo en áreas nuevas de inteligencia artificial, marketing digital, subastas online, y pagos desde la app”, señala Zafar. Razones de peso que llevan a la gestora a mantener la inversión en Facebook.