Los inversores consultados por Barclays en su última encuesta global lo tienen claro: Pekín, con un 36% frente al 7% de la Fed, es más, el riesgo ante este movimiento se encuentra en mínimos de dos años. En concreto, para los inversores en renta variable China es un temor mucho mayor (48%) que la subid […]
Dirigentes Digital
| 06 nov 2015
Los inversores consultados por Barclays en su última encuesta global lo tienen claro: Pekín, con un 36% frente al 7% de la Fed, es más, el riesgo ante este movimiento se encuentra en mínimos de dos años. En concreto, para los inversores en renta variable China es un temor mucho mayor (48%) que la subid de tipos en Estados Unidos (16%), pues reconocen que podría ser negativo para los mercados a corto plazo, pero apenas el 10% piensa que tendrá efectos en los activos de riesgo a largo. Además, un 20% considera que, en realidad, acabará siendo positiva, si bien, los inversores en emergentes son menos complacientes en este sentido.
Así, la mayor parte de los encuestados espera que el primer incremento del precio del dinero se produzca en diciembre de este año y prevén que para finales de 2016 los tipos se sitúen entre el 0,5% y el 0,75%. Por otra parte, aguardan que la rentabilidad del bono estadounidense a diez años se mantenga entre el 2% y el 2,25% en el primer trimestre del ejercicio próximo, aunque con riesgos al alza. "Ante la perspectiva de unas tasas más altas una vez se inicie el 'despegue', los inversores se plantean la protección de sus carteras con activos distintos a deuda soberana", por ejemplo, un 20% busca estrategias basadas en divisas, un 23% en opciones y otros 20% otros tipos de cobertura.
Por otra parte, casi todos los inversores consultados aguardan una ampliación en la duración del programa de compras de activos (QE) del Banco Central Europeo (BCE), pero están más divididos en cuanto a otras medidas: 25% apuestan por un aumento del tamaño, un 30% espera un recorte del tipo de depósito (o señales de que se producirá). A pesar de la opinión consensuada sobre más estímulos, el 53% estima que el bono a diez años aleman se situará entre el 0,5% y el 0,75% o más en el primer trimestre. Calculan también una reducción de los diferencias periféricos hasta los 75-100 puntos básicos.
Con todo, a pesar de que los mercados han entrado en una fase más "calmada" después de la corrección de agosto, los inversores siguen siendo cautos en su exposición al riesgo, pero siguen esperando que la renta variable sea el activo que mejor se comporte. Aún así, estiman aún más caídas para los activos vinculados al ciclo chino (también son bajistas con Brasil especialmente) y son pesimistas respecto a los emergentes en general. Se mantienen muy alcistas en lo que respecta al dólar, postura contraria adoptan frente al euro.
Giro en las estrategias
Destacan los estrategas estadounidenses de la firma británica que el VIX ha caído en noviembre por primera vez desde el 18 de agosto por debajo de 14, pero sobre todo llaman la atención sobre un revés al alza en ciertas estrategias que lo habían hecho peor anteriormente. Por ejemplo, la beta del S&P y la volatilidad lo han hecho muy bien, así como la rentabilidad por dividendo y las recompras de acciones. Al contrario, momentum, ventas y valor nos han funcionado.