Grecia nunca deja de ser noticia y para muestra, un botón. La última batalla en la ‘guerra’ que mantienen Grecia y las instituciones acreedoras es el desencuentro entre Atenas, que no acepta la solución de rescate planteada por los acreedores, y las instituciones. Además, el Gobierno de Syriza, que pretende agrupar todos los préstamos, no […]
Dirigentes Digital
| 05 jun 2015
Grecia nunca deja de ser noticia y para muestra, un botón. La última batalla en la ‘guerra’ que mantienen Grecia y las instituciones acreedoras es el desencuentro entre Atenas, que no acepta la solución de rescate planteada por los acreedores, y las instituciones. Además, el Gobierno de Syriza, que pretende agrupar todos los préstamos, no tiene dinero para pagar.
Esta situación ha vuelto a hacer saltar las alarmas. Si el partido liderado por Pablo Iglesias, Podemos, llega al poder, ¿podría España dejar de pagar su deuda? Y es que, aunque ‘España no es Grecia‘, sí que es cierto que la comunidad internacional se empeña en ver la actuación de Syriza en Grecia como la antesala de las decisiones que Podemos tomaría en España si finalmente llega al poder.
Podemos suaviza su propuesta
El programa que el partido de Pablo Iglesias presentó para las Europeas apostaba por "declarar el impago" de las partes de la deuda pública y privada que tras una auditoría se determinaran "ilegítimas".
En cambio, tan sólo unos meses después, la formación política ha suavizado su propuesta y, aunque esa idea se mantiene, señalan que el verdadero objetivo es recordaran la deuda para recuperar un nivel de endeudamiento sostenible. Y, aunque la economista Bibiana Medialdea apuntaba a que "el objetivo no es no pagar la deuda", una de las cinco resoluciones del congreso abierto que Podemos celebró a finales de 2014 indica que el partido va a "intentar promover en Europa y, especialmente, en el marco de los países periféricos, un proceso de reestructuración ordenada de deuda".
"La reestructuración", prosigue, "es condición sine qua non para la aplicación de cualquier programa económico que tenga como objetivo la recuperación de las condiciones económicas y de bienestar de la población".
Según Podemos, "esto significa que es necesario vencer el discurso de que no queremos pagar las deudas, demostrando que no es una cuestión de voluntad, ni tan siquiera de equidad social (aunque también), sino que se trata en primer término de una cuestión de eficiencia económica y de necesidad".
De momento, Podemos está intentando tener un diálogo fluido con las instituciones. Por eso, el partido se reúne con el organismo dirigido por Christine Lagarde tras el fuerte ascenso que ha tenido la formación en el 24M. El encuentro, que tiene lugar en Madrid, se celebra a solicitud Podemos, que presentará al organismo su plan para reducir la deuda española si, finalmente, logra gobernar tras las elecciones generales.
¿Qué opina Ciudadanos?
Ciudadanos es otro de los partidos emergentes que también ha puesto encima de la mesa el problema de la deuda en España y su compromiso de pago con la Unión Europea. En una entrevista con DIRIGENTES, Albert Rivera explica: "Yo no creo en imposiciones, sino en negociaciones. Soy partidario de cumplir compromisos, pero claro, los que he firmado yo. Les diría a los europeos que es una mala idea que España, el cuarto país de Europa (económicamente hablando) tenga hundida su economía. En cualquier caso, yo no creo que Bruselas sea el enemigo. El enemigo es no entender que la economía no se reactiva recortando derechos a la clase media trabajadora y recortando servicios".
Preguntado por la situación de Grecia y su posible solución, Rivera explica: "Todo parte de una auditoría de la deuda: saber cuánto debes y qué parte de esa deuda son intereses. Es obligatorio sentarte a negociar para ver en qué plazo lo devuelves y qué priorizas en esa devolución. Porque si no, iría en detrimento de los servicios públicos de tus compatriotas".
Preguntado por qué haría si llegara a ser presidente del Gobierno, en relación con la deuda de España con Europa, el presidente de Ciudadanos deja un mensaje muy claro: "Yo voy a pagar, pero si he subido los impuestos y he recortado servicios básicos… A los que me debo son a los que me han votado y no venga usted a decir lo que está pasando en mi país. ¿Dónde está el punto medio? Sentarnos a negociar cuánto te debo y cómo te lo pago, en vez de decir ‘no te pago’, pero luego reunirte de forma secreta y terminar pagando, que es lo que está ocurriendo con Grecia. Yo les diría: déjame respirar, decirte qué ingresos tengo y luego yo te pago. Si no, es imposible que se reactive la economía".