El organismo nipón ha tomado esta decisión ante la evidencia de que la recuperación económica del país se ha quedado estancada, ante el parón del consumo tras la subida del IVA aplicada el pasado mes de abril, justo un año después de que empezara a implementar los estímulos monetarios. "Considerando los datos económicos conocidos esta semana, nosotros […]
Dirigentes Digital
| 31 oct 2014
El organismo nipón ha tomado esta decisión ante la evidencia de que la recuperación económica del país se ha quedado estancada, ante el parón del consumo tras la subida del IVA aplicada el pasado mes de abril, justo un año después de que empezara a implementar los estímulos monetarios. "Considerando los datos económicos conocidos esta semana, nosotros estimamos que la economía ha crecido un 0,4% (1,4 %anualizado) en el tercer trimestre. De confirmarse, sería una recuperación más débil de lo esperado tras la contracción del 1,8% (7,1% anualizado) en el segundo trimestre tras la subida del impuesto sobre el consumo", explica José Luis Rodríguez Campuzano, estratega de Citi en España.
El banco central japonés ha recortado su previsión de crecimiento para el año fiscal 2014/2015 hasta un 0,5% frente al 1% anterior. Pero mantiene su previsión de crecimiento del 1,5% para 2015/2016. Para 2016/2017 rebaja su previsión hasta un 1,2% frente al 1,3% anterior. En este sentido, "la Autoridad Monetaria Japonesa advierte sobre la combinación de riesgos sobre la inflación: desde la debilidad de la demanda hasta la caída de los precios del crudo. Pero, por otro lado, también considera necesaria seguir con el ajuste fiscal para no deteriorar las expectativas con subidas de tipos de interés de largo plazo", recuerdan desde Citi.
El factor sorpresa del organismo, que en sus últimos encuentros no había dado ninguna pista sobre estos planes, ha sido muy bien acogido por el mercado, y tras el fuerte repunte del índice Nikkei, las Bolsas europeas abrían también con alzas superiores al 1%, impulsadas además por el buen dato de PIB de Estados Unidos conocido en la sesión del jueves.
El gobernador del organismo Haruhiko Kuroda ha asegurado que continuarán con el QE todo el tiempo que sea preciso para alcanzar el objetivo de inflación del 2% (para el próximo año sitúan la cifra en el 1,7%), explicando que aún hay margen para tomar más medidas si fuera preciso.
Pero estas medidas pueden reabrir de nuevo el viejo debate de las divisas, pues es previsible que con más liquidez en el mercado, el yen sigadepreciándose con fuerza. "Con ritmos de crecimiento del comercio mundial del 2,5% y pocos indicios por el momento de aceleración, la depreciación del yen (y la del euro, especialmente cuando el BCE se decida a acelerar también sus medidas expansivas) alimentará todo tipo de quejas y debates sobre la consistencia de una mejora de competitividad apoyada en quitarle mercado exterior a otros países cuyas monedas se aprecian", explica Campuzano. "Naturalmente, en el caso de Japón es para luchar contra la desinflación", asegura.