Comienzan los movimientos en el seno de la Eurocámara. Más de mes y medio después de las elecciones al parlamento, el pleno elegirá hoy al candidato del Partido Popular, Jean-Claude Juncker, como presidente de la Comisión Europea. El político luxemburgués sustituirá en el cargo al también conservador José Manuel Durao Barroso para los próximos cinco […]
Dirigentes Digital
| 15 jul 2014
Comienzan los movimientos en el seno de la Eurocámara. Más de mes y medio después de las elecciones al parlamento, el pleno elegirá hoy al candidato del Partido Popular, Jean-Claude Juncker, como presidente de la Comisión Europea. El político luxemburgués sustituirá en el cargo al también conservador José Manuel Durao Barroso para los próximos cinco años.
Para ello, tan solo deberá contar con el apoyo de 376 eurodiputados, cuyos votos, salvo sorpresa mayúscula, ya tiene asegurados tras su designación por parte de los líderes europeos en la cumbre del pasado 27 de junio. A ella únicamente se opusieron Reino Unido y Hungría, pero finalmente se impuso el compromiso adquirido en el Tratado de Lisboa para que el vencedor de las elecciones fuera el principal candidato a la presidencia de la Comisión.
Una mayoría en principio garantizada por el acuerdo de estabilidad suscrito entre populares, socialistas y liberales, que suman 479 escaños, en virtud del cual el socialista alemán Martin Schulz ya logró 409 votos en su reelección como presidente de la Eurocámara el pasado 1 de julio. Sin embargo, el resultado será presumiblemente más ajustado, ya que varias delegaciones nacionales, como la de los socialistas españoles o los laboristas británicos, ya han anunciado que votarán en contra.
En concreto, el recientemente designado secretario general del Partido Socialista Obrero Español, Pedro Sánchez, anunciaba en su cuenta de Twitter que los 14 eurodiputados del PSOE votarán "no" a Juncker. "No apoyaremos al padre de las políticas austericidas", escribía Sánchez, un mensaje con el que ratificaba su posición a lo largo de toda la campaña para situarse al frente del partido, pero con el que la delegación romperá definitivamente la disciplina de voto del acuerdo de estabilidad.
Otros que votarán en contra de Juncker serán los Conservadores y Reformistas Europeos, el grupo de los ‘tories’ británicos, los euroescépticos del UKIP y la Izquierda Unitaria, unos por considerarlo excesivamente europeísta, y estos últimos por considerarlo responsable de algunas de las políticas de austeridad impulsadas por la Unión en los últimos años. Podría recibir, en cambio, el apoyo de algunos eurodiputados de los Verdes gracias a su oposición al ‘fracking’.
No obstante, el resto de socialistas y liberales europeos ha seguido negociando hasta el último minuto con Juncker para tratar de arrancarle alguna concesión másrespecto de su programa electroal. Tras la confirmación del resultado, que se conocerá en torno a las 12:30 horas, se iniciarán las negociaciones para el reparto del resto de cargos de la Unión, cuya designación tendrá lugar en la cumbre extraordinaria de mañana, y en la que el ministro de Economía español, Luis de Guindos, podría convertirse en presidente del Eurogrupo.