Todos hemos oído hablar alguna vez del mercader italiano, Marco Polo, quien estableció la primera ruta comercial conocida entre Europa occidental y Asia allá por el siglo XIII. Dicho trayecto, conocido como Ruta de la Seda, ha sido resucitado en nuestros días por el gobierno de China. La bolsa tiene un índice específico que aglutina […]
Dirigentes Digital
| 20 nov 2016
Todos hemos oído hablar alguna vez del mercader italiano, Marco Polo, quien estableció la primera ruta comercial conocida entre Europa occidental y Asia allá por el siglo XIII. Dicho trayecto, conocido como Ruta de la Seda, ha sido resucitado en nuestros días por el gobierno de China. La bolsa tiene un índice específico que aglutina a todas las multinacionales chinas directamente relacionadas con esta política comercial. Y dicho índice, además, ha ganado en los últimos tres meses un 35%. La política china “un cinturón-una carretera” pretende unir comercialmente Asia oriental con Europa. La “carretera” ha quedado delimitada con el tren de mercancías que, saliendo desde China, recorre ocho países hasta llegar a Madrid. El “cinturón” es una conexión marítima que conecta China con Europa, pasando por varios países del Sudeste Asiático, Oriente Medio y África. Y el recién creado Banco Asiático de Inversión en Infraestructuras (BAII), en principio, es quien debe prestar los medios financieros para que esta red logística funcione. Según fuentes diplomáticas españolas, esta institución multilateral tiene previsto financiar proyectos cuyo valor agregado superaría el billón de dólares, sobre todo puertos y ferrocarriles. La bolsa china, como muestran los gráficos, está premiando a las empresas del índice denominado “un cinturón-una carretera”. Multinacionales del sector de las infraestructuras como Shanghai Jiangong, o China Construction (en el gráfico 2), están registrando subidas importantes desde Julio. La razón es que, si bien se demandan menos proyectos de cooperación público-privada en China, los nuevos socios comerciales del gigante asiático están adjudicando las infraestructuras que necesitan construir a muchas empresas chinas. El excedente chino de cemento o acero, por otra parte, está encontrando salida gracias a los países que necesitan construir infraestructuras con empresas chinas. China, sin ir más lejos, estima que una cuarta parte del cemento producido en exceso podrá destinarlo a proyectos extranjeros financiados por el AIIB. Y algo similar ocurre con el acero. China, por tanto, está amortiguando una menor demanda doméstica de infraestructuras y materias primas con países que pueden absorber su producción. Dicho con otras palabras, el excedente chino está encontrando salida en los países del “cinturón y la carretera”, y esto también lo reflejan las bolsas. Si hay un valor que refleja como ningún otro este rally de las commodities y constructoras, vinculadas al “cinturón y la carretera”, éste es China Zhongye (en el gráfico inferior). China Zhongye es una empresa que casi ha duplicado su valor desde verano. Es una de las ingenierías chinas más grandes. Sus actividades van desde la explotación de recursos naturales y las infraestructuras hasta proyectos inmobiliarios. Ha ascendido posiciones dentro del índice mundial Fortune 500 (el año pasado escaló hasta el puesto 326). Durante los primeros nueve meses del presente ejercicio incrementó su propia adjudicación de proyectos un 15%. Y el consenso del mercado espera, además, que aumente hasta cinco yuanes su beneficio por acción en 2017. Las empresas relacionadas con esta nueva “Ruta de la Seda”, por tanto, también son valores muy a tener en cuenta en bolsa china.