Los hilos de la corrupción llegan a todas partes. En este caso, la trama afecta al sector farmacéutico ya que cinco almacenes mayoristas de distribución y unas 200 farmacias están involucradas. El negocio era redondo ya que se calcula que la organización se ha embolsado 50 millones de euros en España. El trasfondo del negocio […]
Dirigentes Digital
| 30 oct 2014
Los hilos de la corrupción llegan a todas partes. En este caso, la trama afecta al sector farmacéutico ya que cinco almacenes mayoristas de distribución y unas 200 farmacias están involucradas. El negocio era redondo ya que se calcula que la organización se ha embolsado 50 millones de euros en España.
El trasfondo del negocio era fácil: vender en el extranjero medicamentos con precios intervenidos en España. El margen del beneficio ha llegado a ser del 800% en algunos casos. La trama afecta a Granada, Málaga y Barcelona. Y, aunque tiene alcance en todo el país, la investigación se está llevando a cabo por los juzgados de Teruel bajo el nombre de Operación Convector.
Esta operación parte de la investigación Pharmakon que clausuró una farmacia en Palomar de Arroyos (Teruel). De momento, se ha detenido a 30 personas y se ha imputado a otros dos por delitos contra la salud pública, contra la Hacienda Pública y la Seguridad Social, blanqueo de capitales, pertenencia a grupo criminal y falsedad documental. Además, se han clausurado cinco almacenes y cuatro oficinas de farmacia.
Las farmacias solicitaban más fármacos de los que realmente vendían y la trama desviaba el exceso de medicamentos al extranjero. Como el precio de estos medicamentos está intervenido por el Estado, su precio en el exterior era mayor. Entre los medicamentos se encuentran inmunosupresores o anticancerígenos.
Las boticas implicadas derivaban los medicamentos a los mayoristas después de camuflar las ventas con diversos métodos. Entre esos métodos estaba vender los medicamentos como productos de parafarmacia y ortopedia. Y era el almacén el que los vendía fuera a través de un almacén intermedio para no levantar sospechas.
En otras ocasiones, utilizaban a intermediarios, conocidos como "bolseros", que una vez que las farmacias conseguían los medicamentos solicitados por el almacén implicado, efectuaban la compra de los medicamentos (como venta libre sin receta, o mediante receta falsa), y posteriormente se encargaban de transportarlos hasta a los almacenes de la "trama" para su posterior venta en el extranjero.
Efectos
Las consecuencias de esta práctica son graves ya que, por un lado, se crea un desabastecimiento en el mercado local por lo que la Agencia del Medicamento se ha visto, a veces, obligada a importar medicamentos. Por otra parte, los fármacos exportados no tienen las medidas de conservación y seguridad adecuadas.
Además, también ha supuesto perjuicios económicos para el sector privado fabricante. Los fabricantes surten el mercado español a un precio tasado, mientras que en otros países compiten en un mercado libre que frecuentemente les reporta mayores beneficios.
Las consecuencias económicas también llegan hasta la Hacienda Pública porque la red ha incurrido en delitos como la evasión de impuestos, fraudes de IVA, delito fiscal y blanqueo de capitales. La mayoría de estas tramas operan en dinero negro sustrayendo al fisco los impuestos correspondientes, ya que habitualmente no existen facturas ni justificantes para evitar dejar constancia del comercio irregular.