Más allá de las negociaciones pendientes dentro de la república helena, en los parlamentos de sus acreedores y el tortuoso camino que deberemos recorrer hasta el tercer rescate, los expertos consideran que, aún centrado en los fundamentales, la debilidad del euro continuará. Pues la primera subida de tipos desde 2006 en Estados Unidos sigue sobre […]
Dirigentes Digital
| 14 jul 2015
Más allá de las negociaciones pendientes dentro de la república helena, en los parlamentos de sus acreedores y el tortuoso camino que deberemos recorrer hasta el tercer rescate, los expertos consideran que, aún centrado en los fundamentales, la debilidad del euro continuará. Pues la primera subida de tipos desde 2006 en Estados Unidos sigue sobre la mesa y, con toda probabilidad, se producirá después del verano.
Sí, se ha reducido el riesgo de que Grecia salga del euro a corto plazo y la economía de la Zona Euro no despierta tantas dudas, pero "importantes obstáculos deben ser superados antes de cerrar el trato", advierten desde Capital Economics.
La firma llama la atención sobre el "animado debate en torno a si el Grexit sería positivo o negativo para el propio euro". La primera opción, explican, se apoyaría en que la divisa presumiblemente debería fortalecerse sin su miembro más débil y, además, se acabaría con la "perjudicial incertidumbre sobre la participación de Grecia de una vez por todas".
Sin embargo, añaden, inicialmente el euro caería: "La salida de un miembro, por pequeño que sea, temporal o no, sin duda socavaría la confianza en el proyecto común. Después de todo, se supone que es irreversible". Por otro lado, no está del todo claro durante cuánto tiempo podrían estar contenidos los riesgos de contagio, sobre todo, si la economía helena prospera con su salida del euro. "El Banco Central Europeo (BCE) respondería con una mayor flexibilización cuantitativa (QE), manteniendo a la moneda débil".
Con todo, reconocen, que el euro ha resistido mejor de lo que se podría esperar, ya que Atenas ha estado cerca del punto de no retorno en varias ocasiones. "Esto refleja probablemente los potenciales efectos positivos a largo plazo del Grexit, así como el hecho de que el euro ya se ve infravalorado en algunas medidas fundamentales".
Otro factor que apunta a nuevos descensos es que "la reducción de las preocupaciones en torno a Grecia, simplemente despejan el camino para que la Reserva Federal (Fed) comience a subir los tipos de interés antes de lo que el mercado anticipa. De hecho, los peores temores sobre China parecen estar desapareciendo también". Así, concluyen: "Seguimos esperando que el euro caiga hacia la paridad (o por debajo) frente al dólar a finales de este año".
Por su parte, desde ETF Securities consideran que los riesgos a la baja van a primar y recomiendan que "cualquier repunte en el corto plazo" se aproveche como "oportunidad para establecer posiciones cortas". La firma señala que, más allá de Grecia, la actividad económica se beneficiará de los estímulos del BCE y los bajos tipos, pero la recuperación "va a ser gradual". Pues tanto el mercado laboral, como el consumo siguen débiles. "Esperamos que el euro se mueva hacia los 1,05 dólares en los próximos meses, al tiempo que la Fed se dirige hacia subir los tipos".
Qué nos dice el análisis técnico
Los analistas técnicos de Citi sitúan el primer soporte en los 1,087 dólares y, señalan, que de perderse este nivel, las caídas podrían continuar hasta la zona de los 1,05 euros. En el lado de las resistencias, los 1,137 serían la primera.
Por su parte, Andbank explica que "hasta que el crecimiento americano gane visibilidad y con él las perspectivas sobre los tipos, tenemos el rango definido, en el más corto plazo, entre los 1,1 y los 1,15".
Añaden estos expertos que "sólo la salida de este rango abre margen hacia el 1,05, en ese caso las probabilidades de ruptura serían superiores a las anteriores y podrían guiarlo en la búsqueda de la paridad".
Así, sitúan los primeros soportes en los 1,05/1,097 y resistencias en los 1,142/1,158.